El manga es de lo más sangriento que me he echado a la cara. Primeros planos de balas entrando por la boca y destrozando la cabeza, brazos rotos, piernas amputadas, cuerpos aplastados... todo muy entretenido y didáctico. La verdad es que es una serie bastante buena, en cuanto te acostumbras al pelmazo del prota y su poder del amor y la amistad, sus discursos moralizantes dan el descanso perfecto a las escenas de acción, pero sin perder el ritmo.