Bueno, tengo una respuesta profesional, al lío que hubo el otro día. Efectivamente, si una persona pesa 120 kilos y es un hacha de las matemáticas, es inteligente y lo único que lo determina es su C.I, como dijo Lobogris. Pero lo que le falla es la inteligencia emocional. Incapacidad de tomar una decisión correcta aún sabiéndolo. En este caso, perder peso.