Bueno, después de terminarme le juego una vez y media (no he sido capaz de acabármelo por segunda vez. No por dificultad, si no porque algunos niveles te echan un poco para atrás), he hecho una review sobre el juego. Espero que os guste.
Knights Contract es la última creación del estudio Game Republic (Folklore, Majin and the Forsaken Kingdom). Narrada desde el punto de vista de una madre que relata un cuento a su hijo, nos translada a la Europa de un siglo XVII donde la cacería de brujas es una práctica habitual como medio para terminar con la plaga que asola a la humanidad.
Heinrich Hofmann, de profesión cazador y ejecutor de brujas, es maldecido por Gretchen el día que es obligado a acabar con su vida por órdenes del Dr. Faust. Dicha maldición no es ni más ni menos que la imposibilidad de morir.
100 años después, en un mundo dominado por las bestias de una humanidad corrompida, Heinrich y Gretchen volverán a encontrarse, pero esta vez unirán sus fuerzas por una causa mayor, la derrota del Dr. Faust.
Buena pintaLos primeros compases de Knights Contract nos sitúa a los mandos de Heinrich quien, armado con su guadaña, deberá abrirse paso a través de las calles de una aldea infestada de abobinables criaturas. El sistema de juego se basa en la mecánica hack'n slash vista en otros títulos, donde podremos ejecutar golpes de distinta intensidad y velocidad en función del botón que pulsemos, pudiendo realizar diversas secuencias denominadas combos. También podremos hacer uso de la habilidad de agarre y la de esquivo, que nos permitira salir de más de un aprieto.
Para facilitar nuestra labor en combate, tendremos la posibilidad de fijar un objetivo al que atacar y centrarnos en él hasta pasar al siguiente, algo que resultará vital para realizar los combos más devastadores como veremos más adelante.
Sin embargo, todas estas vías de matanza no serán suficientes para acabar con los enemigos más allá de los iniciales que nos encontraremos, y es entonces cuando nos cruzaremos en nuestro camino con Gretchen quien, a través del pacto de caballeros, nos prestará su colaboración y sus poderes gracias a los cuales podremos afrontar el encuentro con cualquier tipo de enemigo, sea de la magnitud que sea.
Una de las características que diferencian a este Knights Contract de cualquier otro juego de su género es la virtud de nuestro protagonista de no morir. Heinrich puede recibir todo tipo de golpes por parte de los enemigos, que siempre se levantará de nuevo listo para el combate. Sin embargo, cuando alcancemos cierta cantidad de ataques o bien ataques individuales de gran embergadura, Heinrich caerá al suelo hecho pedazos y tendremos que "reconstruirle" a base de pulsar repetidas veces un botón.
Sin embargo, como todo tiene su lado bueno y su lado malo, y pese a que Heinrich no puede morir, mientras él esté regenerándose, los enemigos centrarán sus ataques en Gretchen quien, a diferencia de él, tiene una vida limitada.
Como es de esperar, si la vida de Gretchen llega a cero, la partida terminará, con lo cual tenemos que asegurarnos de levantarnos los suficientemente rápido como para acabar con la amenaza de Gretchen antes que éste lo haga con ella.
La parte positiva es que la vida de Gretchen se restituye con el paso del tiempo si ningún enemigo la golpea, y lo hará más rápidamente si la sostenemos en nuestros brazos, ya que las habilidades regenerativas de Heinrich se traspasarán a su compañera.
Jugabilidad sencilla pero con posibilidadesComo en todo buen juego japonés del género que se precie, uno de los mayores atractivos para el jugador no sólo radica en terminar con los enemigos, si no hacerlo de la manera más "elegante" posible. La forma en que Knights Contract evalúa nuestra calidad como jugador, es a partir de los rankings que conseguiremos una vez que terminemos con cada enemigo. La manera de subir la calificación de este ranking (que va desde D hasta S+) es realizar impactos contínuos en nuestro enemigo bien con nuestra guadaña o con la magia de Gretchen sin que éste o algún otro enemigo nos golpee antes. Pero sin lugar a dudas lo que hará subir nuestra calificación como la espuma es la ejecución de un golpe final.
Los golpes finales son poderosos ataques que se realizan cuando la vida de nuestro enemigo llega a un estado crítico (de ahí la importancia de focalizar a nuestros objetivos con el botón de selección). Para realizarlo con éxito, debemos mermar la vida del enemigo con cualquier combinación de golpes y, cuando esté en tramo final, realizar una magia con Gretchen. Esto desencadenará el comienzo del golpe final, pero para realizarlo con éxito debemos sincronizar el último golpe con Heinrich pulsando el botón que veremos en pantalla. Cuanta mayor sea nuestra coordinación a la hora de pulsarlo, más potente resultará el ataque y, por consiguiente, mayor calificación conseguiremos.
Dominar esta técnica nos costará un poco pero, tras algunos combates, lo realizaremos sin problemas en la mayoría de los enemigos. Sin embargo, no con todos los enemigos se nos permite realizar un golpe final, con lo cual deberemos aprovechar aquellos con los que sí podamos para mejorar nuestro ranking final.
La obtención de un buen ranking no sólo sirve de recompensa personal, si no que nos permitirá obtener más almas de los enemigos y desbloquear nuevos poderes para Gretchen. Las almas son la esencia de nuestro progreso, ya que todas las habilidades naturales de Gretchen se pueden mejorar hasta en tres niveles, siendo cada uno de ellos más devastador que el anterior, pero a la vez requerirá más tiempo de espera para poder volver a ser utilizado. Por eso, debemos tener en cuenta que no siempre un ataque más potente es mejor si lo que queremos es conseguir un número alto de impactos en nuestro combo, o si nos enfrentamos ante un elevado número de enemigos débiles.
Durante nuestro camino también encontraremos distintos tesoros ocultos que, al recogerlos, nos proporcionarán poderes extra para Gretchen y objetos con propiedades beneficiosas, tales como la redución del tiempo de invocación, el aumento de la vida de Gretchen o la obtención de un mayor número de almas tras cada muerte enemiga.
Por último, decir que si la cosa se pone realmente fea, nuestros protagonistas aun conservan un as en la manga. A la vez que vayamos consiguiendo almas enemigas, también conseguiremos esencia. La esencia no es más que un poder mágico que se irá acumulando en una barra paralela a la de la vida de Gretchen y que en un momento dado nos permitirá que Heinrich o la propia Gretchen realicen un devastador ataque que aniquilará a todo bicho viviente que tenga la mala fortuna de estar alrededor nuestro.
No es oro todo lo que reluceSi bien el planteamiento jugable de Knights Contract es suficientemente original y atractivo como para llamarnos a jugarlo, no así ocurre con otros aspectos del título que ensombrecen y bastante el buen trabajo realizado por Game Republic en ese sentido.
Comenzando por lo primero que llama la atención, es la irregularidad en la longitud de sus niveles. La historia de Knights Contract resulta interesante de seguir y bien llevada gracias a sus múltiples diálogos y cinemáticas, pero sorprende encontrarse que hay niveles que se superan en escasos minutos y otros en los cuales estaremos horas para terminarlos. Esto, unido a la monotonía y simplicidad de sus decorados, resulta bastante desmotivante para el jugador.
Además, algo que resulta del todo desconcertante es la forma en que se guía (o mejor dicho, no se guía) al jugador a progresar a través de los niveles. Es frustrante encontrarnos dando vueltas una y otra vez a los mismos pasillos y habitaciones porque el juego no nos indica claramente hacia dónde tenemos que ir o qué tenemos que hacer. Las zonas no están claramente diferenciadas (debido a la monotoneidad de los escenarios) y, pese a que disponemos de un mapa interno que podremos consultar cuando queramos, este mapa tampoco sirve de mucha ayuda. La desorientación es tal que incluso en algunas habitaciones es normal que, tras algún combate, caminemos hasta darnos cuenta que en lugar de avanzar hemos recorrido parte del camino por el que vinimos.
Por último, algo que resulta totalmente inadmisible para el jugador, y más aun en los tiempos que corren donde internet nos permite la actualización constante de los juegos, es la presencia de bugs en distintos puntos del juego. Estos bugs pasan por errores de colisión de los personajes, errores en el diseño de escenarios o errores en las físicas. Por ello,
que no nos extrañe ver que avanzamos por un puente y mágicamente nuestro personaje atraviesa el suelo y cae al infinito, con la consiguiente carga de partida guardada (y la consiguiente bajada de ranking a la conclusión del nivel).
Desde el punto de vista jugable, la única pega achacable es la dificultad de algunas secuencias QTE al enfrentarnos a los jefes finales de nivel y que, tras fallar en alguno de los eventos, tendremos que derrotar de nuevo al jefe después de que se le haya restaurado hasta la mitad de su vida, lo cual nos llevará otro buen rato.
Luces y sombrasEn resumen, Knights Contract en un juego con un sistema de combates divertido, retante y que posee contenido suficiente para garantizarnos bastantes horas de entretenimiento. Sin embargo, tras un comienzo bastante prometedor, va perdiendo fuerza hasta el punto en que nos damos cuenta que lo repetitivo de sus escenarios, la poca información para el usuario de los objetivos que debe cumplir y la apariencia repentina de bugs, pesan más que las virtudes que inicialmente hemos remarcado, haciendo que el completar el juego sea más una razón de propia autoestima que el interés por conocer cómo acaba la historia de nuestros protagonistas.
Seguro que si se hubieran reforzado más estos puntos, estaríamos hablando de un título que habría llegado a muchas más personas, porque argumentos no le faltan. Una historia bien narrada, sin alardes en cuanto a originalidad, y una especial mención a la trabajada banda sonora. Pero son pequeñas luces al final de un túnel lleno de sombras.
Nota final: 5/10