MIEDO
Puede que esa sea la palabra que mejor defina mi estado actual.
Acabo de llegar a casa, incrédulo, con un recuerdo en el pensamiento que me impide dormir, algo que nunca me había ocurrido de manera tan exagerada, algo por lo que muchos llorarían, algo que puede que marque al que sufre éste estado.
Una amigo, 05:00 AM, re-entramos a un pub de la ciudad, bastante frecuentado por todo tipo de personas. Sin ir a más, mi amigo se dirige a mi: -Esa chica rubia de 1 m detrás tuya te ha echado el ojo-. Yo, nada sorprendido ante éste hecho (no es la 1ª vez, para que nos vamos a engañar), observo a la chica, intuyo que diciendole algún comentario sobre mi a su amiga.
Pasan los minutos, mi amigo se acerca y se da la situación de que me presentan a la chica. Muy guapa, muy simpática y que coño, me confesó que no se suele fijar en mucha gente pero que yo personalmente le había llamado la atención.
Todo apuntaba a una noche plácida en compañía de una gran chica, su encanto, el cual me había vislumbrado algo diferente al resto de ocasiones.
La noche no ofreció facilidades, ella estaba muy pegada a su amiga y yo se por experiencia que chica con amiga, chica cohibida. SIEMPRE
Sabía que poco podía hacer esa noche, solo esperar, quedar como un consumidor que espera la venta de una nueva mercancía. Una posición desfavorable para mi y la cual no me gusta adoptar...porque no soporto sumisiones...abogo por la igualdad...por el toma y daca...por la expresión de lo que realmente se piensa.
No era mi noche. Más de las 7:00 AM y yo decidí irme a casa, conseguí el nº de tlf. de la chica y mandé a un encargado del pub que estaba cerrando que me abriera la puerta. Me disponía a ir a mi casa, a dormir, a pensar durante la travesía, que había hecho mal y que podría haber hecho bien, realmente, a intentar buscar justificación a mi actuación para no caer en la autocrítica.
Era imposible, antes de que pudiese ponerme a pensar, un hyundai coupé (no recuerdo el color), para a mi lado, avanza a mi ritmo. Yo en la acera, escucho con tono plumesco...-Oye chico, te apetece que te llevemos a casa?- Yo, iluso de mi, pensaba que se trataba de la típica broma de los canis de turno. Pensé que 20 min. de camino a pie, podían ser reducidos a 2 min. hasta mi casa a pie. Sin meditar mucho donde me estaba metiendo, me senté en el asiento del copiloto, con 5 GAYS en el coche. Joder, que había hecho yo para merecer ésto?? He sufrido caricias, achuchones, frases increpantes, insinuaciones reiteradas...
Joder, era una especie de violación psicológica. Conseguí que me dejaran cerca de casa. Tuve que enviarle un sms a un vecino amigo mio, necesitaba desahogarme, pensar que podría dormir esa noche sin que se me viniera a la mente la imagen del coche.
Aclarar que la cosa no pasó mas allá de lo que os cuento. No malpenseis, me encantan las mujeres, las amo, adoro sus senos, su trasero, su figura, sus caricias, su...
No soy eso que todos estais pensando, no se como pudo pasar, no se por qué accedí a subir a ese coche, quizás el cansanció estaba apareciendo y necesitaba llegar cuanto antes a casa.
Y aquí estoy, contando una historia para no dormir. Una historia que os provocará tanta risa que os estareis riendo de mi 1 mes.
En fin, AMO a las MUJERES, NO soy gay. Si alguno de los 5 que estaban en ese coche es usuario de éste foro, que sepa que los respeto a todos, pero exijo que se respete mi orientación heterosexual, mi atracción por el género femenino.
Bueno, voy a quitarme las lentillas y a dormir un rato. Pido a quien sea que esté ahi arriba que me ayude a no pensar en ésta noche. Solo que me haga reconocer que debería haber llegado a más con la chica, pero nada más, por algo tengo su teléfono.
Un saludo a todos, siento el ladrillo y disculpadme.