i3rk escribió:spiderrrboy escribió:@i3rk Claro yo hago más furtivos por tener a otro personaje al lado del enemigo, que por ocultarme e ir poco a poco, que aparte de ser un poco coñazo, siempre termina descubriéndote alguien o pasa algo...
Lo de ocultarse vale de poco si no utilizas la movilidad del personaje.
Un ejemplo, si tienes el pícaro a rango, es dejarlo siempre un poco atrás y usar el escenario.
Primer turno: Acción normal, lanzas ataque furtivo (Si eres asesino y encabezas iniciativa, o posicionas a alguien a cuerpo a cuerpo contra un enemigo), te alejas para ponerte detrás de una esquina/barril/pared/ y AHORA sí, te escondes.
Segundo turno: Sales escondido, lanzas furtivo, te vuelves a posicionar detrás de la esquina y te vuelves a esconder.
Y repetir.
De todas formas, un par de apuntes;
A) Es una pena que Larian no haya respetado los encabezamientos de iniciativa con cosas como "Reservar acción". Eso imposibilita algunas jugadas tácticas, y pierde bastante la gracia encabezar la inciativa; ya que deberías poder actuar en cualquier parte del turno. (Los enemigos también, ojo).
B) Habría que dejar de pensar en el pícaro como una clase de daño y verlo por lo que es; una de las clases más polivalentes para dentro y fuera del combate. De hecho, a mi forma de manejarlos, creo que un pícaro que acaba cubierto de sangre es un pícaro que no ha hecho bien su trabajo; que debería ser evadir conflictos.
Dicho lo cual, el combate en BG3 muchas veces es algo inevitable, y sigue siendo un personaje que puede darle la vuelta a un combate si se usa con cabeza. No necesariamente por el daño inflingido, sino por la posibilidad que le brinda (Junto a objetos mágicos) su propia movilidad.
Estamos hablando de un personaje que puede entrar en una refriega, lanzar un pote de curación al figther, y salir corriendo del mismo SIN generar un solo ataque de oportunidad. Que puede esconderse para flanquear el enemigo y/o tomar rutas.
Para un pícaro su abultado inventario es su mejor amigo; objetos, pociones, venenos, pergaminos de conjuros...