Voy por el cuarto boss y me da pena pero ya estoy sintiendo la sensación de hartazgo.
Os he leído por arriba el tema de poder cortas los combos. A mí me parece que que no se puedan cortar tiene todo el sentido del mundo. Tienes que saber cuando utilizar un arte larga, una corta, cuando esquivar... Y en caso de que te lo vayan a cortar, siempre puedes utilizar el ataque especial para ganar invulnerabilidad y que el combo no decaiga. Al final se trata de eso, de que no decaiga pero...
Porque habiendo parido un sistema de combate tan interesante literalmente TE LO QUITAN en los bosses. No hay posibilidad de combear porque da igual, el ataque potenciado solo se puede hacer cuando llegan a la mitad y al final de la vida. En lugar de estar prepcupado por combear lo estás de que tus aliados no se mueran por idiotas. El moveset de los bosses es ridículo, manejando a sólo un personaje puedes facilmente plantar batalla pero claro, a ver quien está 45 minutos de reloj pegándole al boss en cuestión.
En fin, el juego me parece un encanto. Incluso los mapeados, por muy ingenuos que sean en su diseño, me gustan por esa sensación que me dan a 'juegos de los de antes'. Pero para mí esta claro que el pilar central del juego es el combate, y entre los enemigos repetitivos y el problema con los bosses, al final queda muy deslucido.