Chicos, algunos os habreis dado cuenta de que apenas he aparecido por aquí desde navidades. Otros seguramente no os habeis enterado, ya sé que no soy tan importante
En cualquier caso, por motivos personales, hace tiempo que tomé la decisión de desvincularme del mundo de los videojuegos clásicos. Y digo clásicos porque de los actuales llevo desvinculado casi desde cuando Dreamcast. Exceptuando Pros, Singstars, demás
casualidades y alguna excepción puntual. Esa desvinculación implica dejar de visitar EOL, entre otras cosas.
Os quiero explicar mis motivos. Son largos, sabeis que cuando me pongo a escribir, no paro. He compartido mucho con vosotros aquí mucho tiempo, y ya que he decidido desvincularme, aunque no al 100% pero casi, de todo esto, me gustaría exponer por qué.
Primero hablaré de la mierda, y así me la quito de encima cuanto antes. Bien es sabido por todos que no soy capaz de toparme con idiotas radicales sin discutirme. Por discutir de futbol me banearon de miscelania (3 veces) y por discutir de videojuegos me banearon de aquí otras no sé cuantas. No soy capaz de toparme con gente estúpida y simplemente aceptar que suelten porquería por la boca sin replicar. Eso me ha llevado a hacerme mala sangre con gente que estaba y ya no está, ser odiado por muchos, querido por otros, y bueno, meterme en saraos que si bien podían divertirme en su momento, ahora claramente no me compensan y no me apetecen.
La vida implica cambios, y entre ellos yo he decidido que me compensa no meterme en foros para acabar discutiendo con idiotas. De hecho uno de mis últimos posts era porque uno de ellos sacaba bilis porque coleccionaba arcades y alguien hablaba de emuladores. Y no pude evitar decirle cuatro cosas, porque forma parte de mi caracter y ya a estas alturas como no haga Yoga no me veo callándome ante tanta estupidez.
Aún así, ese no es el motivo principal ni importante, porque al final se hace llevadero, los tontos vienen y se van o les banean, y finalmente algún día me acaban baneando a mí cuando el número de tontos es superior a x y mi paciencia se desborda.
Los motivos para desvincularme son otros personales. Tienen que ver con la inversión de mi tiempo en otras cosas que valoro más, y con el fin de la Magia.
Cuando era pequeño, y hasta la época de Dreamcast, como conté ámpliamente en el hilo de mi colección, estuve muy vinculado a los videojuegos. Empecé con 6 años en el Spectrum y a partir de ahí fui viviendo la Magia hasta los Capcom vs SNK de Dreamcast, que la culminaron.
Os explico lo que entiendo por
Magia.Me fascinaba cargar un juego en el Spectrum y ver esos pixels y sonidos, desconocidamente por mí colocados ahí de tal manera que respondieran a mis órdenes. Era ver la tele pero interactuar con ella. Era algo Mágico. Yo pulsaba las teclas y pasaban cosas. Era inexplicable... pero a la vez, claramente inferior a lo que veía en los salones recreativos.
Y los salones recreativos eran una maravilla. Me podía pasar horas dando vueltas viendo las máquinas hasta que mis padres me decían "venga, vámonos ya". Siempre que iba, fantaseaba luego con si podría alguna vez ver esas mismas cosas en casa (con 8 colores lo llevaba claro). Hablo de finales de los 80 principios de los 90, así que tampoco es que fuesen maravillas.
Cada cumpleaños o reyes magos podía abrir un regalo y encontraba uno o más juegos. Miraba las screenshots de detrás, y flipaba. Me podía pasar el día entero, y posteriores, dándole caña al juego en cuestión para ver las fases siguientes, escuchar las nuevas músicas. Flipar con como apuraban los programadores con el hardware de la época para hacer cosas increibles. Y sobretodo, anhelaba terminar el juego y ver el final. Algunos eran una mierda, pero otros te ponían "la gallina de piel".
Cada mes iba al quiosco y compraba la publicación (o publicaciones consoleras) de rigor, y flipaba con las screenshots de juegos de Mega, Pc Engine, SNES, Neo Geo... yo después del Spectrum sólo tuve la NES, y todo quedaba tan lejos...
Iba a casa de los amigos que sí tenían dichas consolas y flipaba, las horas pasaban volando y siempre me quedaba con ganas de más.
También pasé por el PC, y con la misma sensación de "querer y no poder". Tenía un PC malo y siempre tenía que jugar a todo en condiciones peores, y si compraba las revistas o veía los juegos en el Corte Inglés, o me iban peor o no me iban, por no decir que además tenía una pantalla monocroma y Speaker, nada de colores ni soundblaster. Pero el Monkey Island con esas inteligentísimamente compuestas músicas para Speaker, aún en blanco y negro, era una "película interactiva" acojonante. De hecho, cuando me lo pasé, el juego me decía "apaga el ordenador y vete a la cama!". Y tenía razón, igual eran las 4 o 5 de la noche el día que por fin descubrí como llegar a ese estupendo final.
En los 90 en los arcades veíais auténticas maravillas. El Street Fighter 2 simplemente fue como una droga. Me valía con ver screenshots en las revistas o ver el modo attract sin jugar. No importaba, era fascinante. Tantos personajes, esas músicas, esos golpes, esos ataques especiales estilo Dragon Ball lanzando "kames"... y cualquier juego de Neo Geo era mágico. Sus colores y sonidos eran del futuro. Soñaba con tener esas cosas en casa. Sus personajes gigantes eran brutales, llegabas a casa y veías el Double Dragon II de NES, juegazo también, pero anhelabas ver ese Ryo y ese Robert repartiendo estopa con esos sonidos tan brutales y ese tamaño tan bestial. Que el tamaño no importa dicen, pse!
Cuando finalmente tuve la SNES, empecé a tener los juegos buenos de la época (aunque la tuve tarde). Coincidió también con que tenía un Pentium en la época de los Pentiums, así que por fin pude dejar de ir por detrás y disfrutar de los juegos que tocaba casi cuando tocaba. Los últimos juego de SNES con los que experimenté "la Magia" fueron el Hiper Dimension y el Street Fighter Alpha 2. Descubrir los meteoros del Hyper Dimension formaba parte de la magia. Esa magia es proporcional al número de horas, días y meses que les di caña flipando con gráficos, sonido y diversión con los amigos. No eran como las recres... pero casi.
En aquella época, para que la Magia siguiera sorprendiendo en los arcades, tenía que ser con juegos como Soccer Superstars de Konami, mi deporte favorito en "3D", o XMEN vs Street Fighter, mis personajes de lucha favoritos (que no los xmen que ni los conocía) con poderes a lo bestia. Aluciné al verlo.
Tiempo después, y habiendo pasado por la play aunque poco, llegó el Capcom vs SNK de Dreamcast, el juego por el que quería la consola, y la Magia implicaba un sueño hecho realidad: mis dos sagas de lucha 1 vs 1 unidas en el mismo juego, y con Dreamcast en general los Arcades igualitos en CASA, por FIN.
De alguna forma cerré el ciclo, los juegos nuevos realmente ya no me interesaban más, seguramente también gracias a que con la piratería de Dreamcast, tuve todo lo tenible y en lugar de sacar jugo a todo como antiguamente cuando me regalaban un juego, los probaba, veía como eran y fuera.
Ahí empecé otro ciclo: el coleccionismo. Con el tiempo he visto que lo único que quería era recuperar esa Magia y esa ilusión.
Y de alguna forma lo logré. No es lo mismo tener 10 años y que te regalen una Atari o juegos, pero compensaba tener 18 o 20 e ir a los Encantes, encontrar una Atari y juegos, poder comprarla y la ilusión de haberla encontrado (barata además) y de probarla en casa. No era el mismo tipo de ilusión, pero era otro tipo de Magia nostálgica que no estaba nada mal. Lo mismo pasaba encontrando algo en ebay, pues en esa época no abundaban las cosas clásicas y encontrar algo y conseguirlo, al recibir el paquete a casa era como tener un regalo de esos que abrías con tanta ilusión.
Substituida una Magia por otra, pasé por todo lo que habeis visto en
el post de mi colección (que no es poco) pero llegó un punto en que ahí, la Magia, también se terminó.
En definitiva, la Magia de cuando era pequeño, de que me regalaban un juego y quería ver esos gráficos y sonidos que me sorprenderían, esas historias que me gustaban porque joder, era un niño y ahora ya no... eso, ya se terminó.
Hoy día los gráficos y sonidos no sorprenden, cada vez hay más resolución y polígonos... vale. Todo ha cambiado, el sector en sí y lo más importante, yo. Ni tengo interés ni tengo edad para los videojuegos. Lo de la edad es muy relativo, no os tireis a mi cuello. Simplemente yo he quemado toda esa ilusión, y algunos, mayores que yo, aún la teneis. No os llamo inmaduros, ni mucho menos.
La Magia de lo clásico actualmente también ha muerto bastante para mí. Ahora ir a los encantes y encontrar una Atari, no tiene puta gracia, porque si quiero una, cojo ebay la compro me la mandan directa a casa y en mejor estado y arreando. ¿Qué clase de magia es esa?
Es lo mismo que me pasó con los juegos. De pequeño no tenía sueldo, sólo podía tener 2 o 3 al año, y los exprimía. Ahora tengo un buen sueldo y hay piratería, puedo tener los juegos que quiera antes de que salgan y encima me interesan menos: Magia 0.
Lo mismo pasa con lo clásico, está casi todo a la venta por internet, excepto 2 cosas concretas que ya mencioné en mi hilo de la colección que me gustaría recuperar y nunca veo a la venta. Recuperar esas dos cosas me haría experimentar de nuevo esa Magia nostálgica de volver atrás en el tiempo... pero ya está. Sólo eso.
A eso tengo que añadirle que realmente, estoy harto de todo eso. Me doy cuenta de la cantidad tiempo que invertí con la primera magia de pequeño y adolescente y con la segunda de ya adulto, que me maldigo a mí mismo.
Veo que siempre colecciono pensando "así un día cuando sea mayor y use todo esto, la nostalgia me llenará".
Sí, pero, y el tiempo que has invertido, colega, en crear eso? Vale la pena invertir 10 años en coleccionar para que un día que estés tontito te de por jugar a tus juegos viejos? Creo que no. Y realmente, si ahora pudiera, cambiaría esto. Hay muchas otras cosas que he descubierto que me llenan más con las que hubiese preferido invertir mi juventud que con apilar cacharros "para un futuro más nostálgico". Y ya no estoy a tiempo.
Y lo peor es que hace bastante, unos 3 años desde que me dedico a mi trabajo actual, que realmente no tengo ningún interés en videojuegos antiguos ni nadie de mi entorno lo tiene. De alguna forma, y habiendo dejado mi colección en casa de mis padres y bastante "escondida", por fin estoy desvinculado, y dedico mi tiempo a muchas otras cosas que además prefiero. Lo único que me lleva a querer jugar, recordar y comprar cosas es este foro. Y sigo entrando, porque de alguna forma, es como una droga. Juegos antiguos, más, más... me gusta hablar de ellos, me gusta compartir recuerdos, me gusta recordar. Pero me entran ganas de comprar cosas o meterme en proyectos que luego ni tendré tiempo ni realmente me compensa hacer, y no me gusta.
Así que (dios, que tochos escribo, gracias por leerme ser humano) llegamos al punto de partida del hilo. He conseguido desvincularme totalmente de mi colección. La última compra, los dos juegos de NES de caja pequeña que me faltaban, la dan por terminada y encerrada por lo menos hasta que dentro de unos años vea hacia donde va mi manera de ver el tema.
Tengo mi colección cerrada y posteada en el foro, cosa que también "necesitaba" hacer para poder cerrarla, compartirla y que no sólo yo pudiera "disfrutarla" en cierto modo, pues la empecé en plan museo y tenía que poder cumplir su función.
Hecho esto, lo único que me quedaba por hacer era desvincularme del mundillo, dejar de venir por aquí, y casi casi así lo hice.
Desde el 25 de diciembre, he entrado pocas veces, lo justo para pelearme por aquí y en feedback, y para reirme con vosotros del fenómeno "tío de la alcantarilla". Quería dejar todo esto al empezar el año, pero me he querido dar todo un mes de reflexión (y os garantizo que que mañana sea 1 de febrero y vuelva otro idiota es pura casualidad, aunque es una buena coincidiencia).
Y aquí hemos llegado, mi decisión es seguir entrando en EOL pero poco y no postear demasiado. No postear implica no respuestas e implica menos respuestas que leer y razones para volver a entrar. Os leeré, de vez en cuando, porque mi dosis de nostalgia me gusta, y no dudo que algún domingo o algún día me sienta nostàlgico por lo que sea y me de por postear, pero sólo en su justa y poquita medida, para redirigir mi vida hacia lo que realmente me llena ahora, perder menos tiempo en internet y cerrar el ciclo. Los videojuegos clásicos estuvieron ahí, y me llenaron. Pero toca pasar página.
Os agradezco a todos los que os llevasteis bien conmigo y me apoyasteis en mis estúpidas cruzadas todo este tiempo. Este foro ha sido otra etapa más de la Magia, otra manera de vivir este hobby. Y no os conozco a casi ninguno en persona, sería infravalorar el término amigo decir que tengo amigos por aquí. Pero sí excelentes colegas de afición. Eso, sin ninguna duda.
Nos leemos