Jean Claude Juncker, presidente de la Comisión Europea, ha propuesto durante su discurso sobre el estado de la Unión una revisión de la normativa sobre telecomunicaciones de la Unión Europea. El objetivo es favorecer las inversiones en redes de muy alta capacidad y acelerar el acceso público al wifi de los europeos.
“Tenemos que estar conectados. Nuestra economía lo necesita. La gente lo necesita. Y tenemos que invertir en esa conectividad ahora mismo”, ha dicho Juncker. Para lograr esa conectividad a lo largo y ancho de la Unión Europea la Comisión ha presentado hoy tres objetivos estratégicos para 2025:
- Todos los motores socioeconómicos importantes y proveedores de servicios públicos deben tener acceso a una conexión simétrica extremadamente alta: 1 Gigabit.
- Todos los hogares europeos, rurales o urbanos, deben tener acceso a una conexión de 100 Mbps, mejorable hasta el Gbps.
- Todas las zonas urbanas, así como las principales carreteras y ferrocarriles, deben tener cobertura ininterrumpida de 5G.
Aún queda mucho para el 2025, así que la Comisión también se ha fijado objetivos intermedios. Entre ellos destaca el proyecto
WiFi4EU, que tiene como meta dar a todas las autoridades locales interesadas la posibilidad de ofrecer conexiones wifi gratuitas a cualquier ciudadano.
El presupuesto inicial de WiFi4EU es de 120 millones de euros, se estima que podría generar entre 40 y 50 millones de conexiones wifi al día y llegar a un mínimo de 6.000 a 8.000 comunidades locales de aquí a 2020. La financiación para la instalación de los puntos de acceso correrá a cargo de la Unión Europea, pero del pago mensual y el mantenimiento del equipo se encargarán los organismos públicos, que podrán aprovechar esta iniciativa para promover sus servicios digitales.
El plan de acción para la 5G contempla ensayos a partir del 2018 y que al menos esté comercialmente disponible en una de las principales ciudades de cada Estado miembro de la UE en 2020.
Para alcanzar los objetivos de conectividad anteriormente mencionados la Unión Europea dice que será necesaria una inversión de 500.000 millones de euros durante el próximo decenio. Se espera que estos fondos procedan en gran medida de fuentes privadas, así que también se ha presentado un nuevo Código Europeo de Comunicaciones. Este código busca ofrecer mayor competencia y previsibilidad, mejor uso de las radiofrecuencias y una normativa más justa para todas las partes, en otras palabras,
equiparar las obligaciones entre los operadores tradicionales y los nuevos agentes como WhatsApp.
El código también quiere dar al consumidor una mayor protección, facilitando el cambio de proveedor cuando los consumidores han suscrito ofertas combinadas (Internet, teléfono fijo, televisión y teléfono móvil) y garantizar que los grupos vulnerables tengan derecho a contratos de Internet asequibles.
Por último, Juncker se ha comprometido a presentar "en semanas" una nueva propuesta que liquide el
roaming dentro de la Unión Europea en junio del 2017. La iniciativa de eliminar costes por itinerancia durante 90 días anunciada hace unos días
fue retirada a petición del propio presidente.