Yo también soy de los de supermercado

. Empezando por el hecho de que odio a muerte los lugares ruidosos, con humo y gente indeseable y/o drogada -y en eso las discotecas están en lo más alto del Top Ten-, y acabando por el hecho de que no soy de los que se enrollan con una tía sin saber nada de ella (lo mío son 3 semanas mínimo) y mucho menos como deporte para que me dure un fin de semana. Política de empresa. Una discoteca está muy bien para ver culos y enrollarte con tías -que es posible, como bien se ha dicho-, pero de ahí al "nos conocimos en una discoteca y ya llevamos 20 años casados" hay un trecho, al menos para la gente corriente y moliente no-bakala como yo. Un bar de copas donde puedes hablar con alguien está bien para conocer gente y también para tontear un poco, pero yo exijo hasta el DNI.
Como preguntas por una táctica yo te puedo contar la mía, que normalmente incluye ligar involuntariamente o por accidente. Lo primero es tener novia o, como decían en Aquí No Hay Quien Viva, "cara de tener novia". Lo segundo es encontrar una de esas salas de "descanso" con sillones y luz pornográficamente roja entre otras salas de bailoteo en las discotecas, y si es en Barcelona, mejor que mejor. Añadimos que te han clavado 18 euros por un Martini de mierda -menos mal que no bebes- y que la *insertar adjetivo favorito* de tu novia lleva bailando con sus amigos y pasando de ti un buen rato (no la ves desde hace 5 horas, pero sus amigas van haciendo relevos cada 45 minutos para darte conversación a gritos), así que te apetece salir de la zona hiphopera porque encima tienes la desgracia de no saber bailar -ni que te interese, vaya-. El truco está en sentarte en uno de esos sillones, poner cara de aburrido y esperar a que se acerque una chica y te pregunte:
-Hola, ¿estás solo?
Y tú, que eres idiota y encima estás agilipollado por el humo, mires a izquierda y derecha, te tomes la pregunta literalmente y le digas:
-Claro.
Vamos, que tienes que ser un genio de la perspicacia como yo.
El resto está facilísimo, no tienes más que decirle que estás aburrido y responder a sus preguntas con gracia y buen humor -llevas horas contándote chistes a ti mismo, podrías hacer reír hasta al gran Eugenio-, y ya verás como se sienta a tu lado y se va acercando peligrosamente cada vez más, y más, y más... hasta que llega tu novia (ahora ex) -a la que sus amigas han avisado de que te han visto con una chica-, la fulmina con la mirada y te pega un estirón de brazo hacia su sala que casi te deja manco. Eso sí, sabes que en el fondo está contenta porque su posesión-novio ha sido codiciada por otra hembra. Qué bonito es el amor...
Pero nada, lo mejor es un sitio tranquilo. Dando clase se liga un montón -y si son particulares ni te cuento- y encima puedes cobrar hasta que la tienes (o te tiene) en el bote y le empiezas a dar clases gratis y fuera del horario de cualquier mortal. Desde aquí quiero saludar a la profesora que suspendió, con muy buen criterio, a mi novia hace dos años
Para ligar en discotecas también puedes echar un vistazo al más que famoso Manual del Ligue que ponen en yonkis.com cada vez que se les acaban las ideas -es decir, a todas horas-, es muy divertido y se ajusta bastante a la realidad. La técnica del empujón no me la sabía, pero puedes ver un ejemplo en miles de películas -chica empollona (pero guapa cuando se quita las gafas) que lleva libros en las manos y dobla esquina y chico guapo capitán del equipo de fútbol/béisbol que se topa con ella al doblar la misma esquina-. Puede que acabes apestando a cubata cuando te hayan caído 10 ó 12 en una noche, pero si no te has llevado ningún hostión tienes probabilidades de ligar. ¡Adelante!
Y si no, los Seven Eleven están siempre abiertos...