Lista de Platinos y juegos completados al 100% ( Ps4 )

Este juego para mí es realmente especial. Es, para empezar, el juego que me metió de lleno en el mundillo y, aunque seguramente sea una exageración, el juego que inició mi andadura y que me ha traído hasta hoy a escribir aquí. Es evidente que aunque hubiese sido más tarde, hubiese podido encontrar otro juego que me causara lo mismo y al final me hubiese hecho amar los videojuegos tanto como los amo hoy, pero el caso es que el que me abrió la puerta fue éste.

Fue, además, un juego que gracias a su protagonista tan gris, a su historia sobre el amor y la guerra pero que en el fondo trata sobre los traumas y la evolución de Squall, me hizo plantearme cosas verdaderamente importantes a la tierna edad de 10 años. Hay varias frases de Squall que se me quedaron grabadas, que hoy nos parecerían una obviedad, pero que a mí con esa edad me hicieron comprender mejor algunas cosas.

Por ejemplo, dos de entre muchas:

"En la guerra no hay ni buenos ni malos, solo aliados y enemigos." o "Desde su perspectiva, todo el mundo cree que hace el bien.". Son cosas que te pueden hacer pensar, que te hacen ponerte en la piel del otro y es curioso que a él le tachen de falta de empatía o pesimismo, cuando realmente, a pesar de seguir las órdenes que le mandan, no deja de cuestionarse y decir que le gustaría poder hacer las cosas de otro modo y sobre todo, no deja de pensar en que todo lo que sucede, sucede por una razón y no se reduce a si algo es bueno o malo.

Es un juego al que mucha gente le tiene como el patito feo de la trinidad de PSX o, si no, como el "menos bueno". A mí me parece el mejor. No dudo que por todo esto que estoy comentando, por la subjetividad a la que estoy encadenado al haber sido un juego que me marcó tanto en tantas cosas. Pero creo sinceramente, hoy por hoy, tras haberlo terminado de nuevo hace minutos, que tiene una historia tremenda y un personaje principal espectacular. No tanto el resto de miembros del grupo que sí creo que pueden ser de los más flojos de la saga en general.

Por otro lado, hablando del propio Squall, diría que es el protagonista de la saga con mayor diálogo interno. Aunque él no se expresa a los demás, tú sabes lo que piensa y lo que siente, y sabes por qué es así. Él mismo se cuestiona muchas veces si lo que está haciendo es lo correcto, si necesita ayuda, si debería abrirse más. Yo empatizo con él porque en esa época y en los años venideros de mi vida, también era muy como él. Cuando jugué a FFVIII por primera vez hacía cuatro años que murió mi padre y me veía totalmente reflejado en la manera de Squall de afrontar las cosas.

Y al mismo tiempo que me veía reflejado, podía analizarme a mí mismo al tiempo que le analizaba a él. Podía ver las cosas en las que él se equivocaba y en las que no debería equivocarme yo. Es un juego que me hizo madurar igual que otro de la época, Metal Gear Solid, que también me hizo plantearme muchas cosas.

Habrá gente a la que todo esto le parezca una tontería, pero lo cierto es que no lo fue. Si hubiera jugado a FFVIII más tarde probablemente no me hubiera causado el impacto que me causó, probablemente habría sido un juego más porque las lecciones que aprendí aquí, o ya las hubiera aprendido, o no les daría la misma importancia. Y si lo hubiera jugado más joven, seguramente no habría podido entenderlo tal y como lo entendí. Es un juego del que adquirí ciertos valores que hoy en día conservo, con lo cual, lo considero una piedra angular que ha marcado y definido bastante el como soy hoy.

Puedo hablar de lo que no me gusta del juego como tal, como lo es por ejemplo tener que elegir la lista de comandos o el "Extraer" magia. O el sistema de niveles. Pero para mí FFVIII es todo lo de ahí arriba.