Lo siento mucho. He perdido 3, uno era de mi hermano pero como si fuera mío, y es doloroso no, lo siguiente. Mi perra fue la última en morir, con 10 años, una cócker preciosa y juguetona que daba vida a la casa. Fue un palo gordísimo y me costó superarlo. Aún pienso en ellos y se me pone la piel de gallina, y hace casi 2 años de la muerte del primero (murieron el mismo año los 3, con 3 meses de diferencia entre ellos).
Ayer para colmo fui al veterinario con el gato de mi suegra y vimos cómo llegaba una familia llorando con una perrita viejecita en brazos, a la que parece ser que iban a sacrificar justo en ese momento. Se abrió la puerta de la salita donde estaban haciendo el sacrificio y vimos a la familia entera llorando como niños abrazando a la perra. Durísimo de ver, la verdad. Se te vienen todos los recuerdos a la mente.
No sé, mucho ánimo. La verdad es que se te quitan las ganas de tener otro, pero luego te acuerdas de los años en los que has sido tan feliz con tu perro como un niño con el juguete más chulo del mundo, y dices...merece la pena, aunque luego se lleven una parte de ti.
Un abrazo.
PD: PikaPikaTapasBar... es malísimo el chocolate y los huesos de pollo o de conejo para los perros. Que en tu caso no pasara nada no quiere decir que se pueda dar libremente, porque tu caso está claro que es una excepción. Es como si dices: mi padre fumó desde los 12 años y nunca le pasó nada, ni cáncer ni leches... ya, pero puede pasar.