Es una cuestión de buscar el perfecto compromiso entre calidad de imagen, resolución y rendimiento. Yo pasé hace un año de 1920x1080 a 2560x1080. He ganado campo de visión, pero no he perdido demasiado rendimiento, que se pierde, pero poco. No quise subir de resolución para poder estar más tranquilo a medio plazo y no tener que pensar en cambiar de gráfica de forma inminente. No tengo prisa para el 4K mientras no vea un monitor de esos, así mantengo al ojo habituado a los 1080p. Mi próxima gráfica (no sé si Polaris, Pascal, Vega o su puta madre) imagino que podrá mover 4K de forma fluida. Veré qué hago cuando llegue ese momento.