Cada vez que leo este tipo de cosas tengo más claro que como sociedad hemos fallado.
Empezamos dejándolas salir de la cocina "porque no iba a pasar nada" y ahora este tipo de historias se repiten casi todos los dias. Y joder, me revuelve el estómago.
Pero la culpa es tuya. O cambias o te vas a la mierda. No hay más. Si esto ha pasado este fin de semana, empieza ya mismo con la reeducacion.
- Lo primero, hoy doble de plancha. Si es preciso, coge todo tu armario y tiralo al suelo. Que quede todo bien arrugado. Camisas, polos y chinos, mejor, que jode mucho plancharlos.
- Cuando haya acabado la mandas a fregar. Suelo, vajilla, cristales. Lo que sea.
- Cuando haya acabado empezará a entender que ha hecho mal y cuales son las consecuencias. Entonces es cuando debes soltar el caramelo, déjala que juegue en la cocina. Pero no mucho. Esto es un premio y debe entender que los premios hay que ganárselo. Un tiempo prudente puede ser el necesario para prepárate la cena.
Repite las fases 1, 2 y 3 sistemáticamente a lo largo de la semana. Paralelamente haz lo siguiente:
- Cuando se duche cogele el movil. Supongo que tu le habras puesto la clave de seguridad o pin de desbloqueo. Este es el momento de usarlo. Haz un primer cribado y desecha los nombres ambiguos como Alex, Andrea o Ale. Céntrate en los Paco, Pepe, Ramón o Juan. Mira si les llama o mantiene conversaciones por WhatsApp con ellos.
- Presentate aleatoreamente y sin previo aviso por los lugares que frecuenta. Trabajo, ocio... y observa. Si ves algo que no te cuadra, plantate en medio, y sin saludar ni nada expresale tu disgusto.
Y por lo que más quieras, nunca, nunca jamás de los jamases debes soltar dinero que no sea para un encargo que tu le hayas hecho o para llenar la nevera.
Puedes seguir estos consejos o puedes dejarla marchar. Me hace gracia la gente "que no es celosa ni posesiva" pero solo vas a hablar cuando y con quien yo quiera.