Netflix se ha convertido en uno de los mayores proveedores de contenido 4K, aunque con una pega: generalmente su uso estaba limitado a los usuarios que tuvieran una Smart TV o un dispositivo de
streaming de 4K, incluso si se había pagado por una suscripción con dicha resolución. Ahora los PC también podrán incluir
streaming en 4K (y no 1080p como máximo), aunque con
muchas restricciones y bajo un único sistema operativo.
La primera y más estricta de estas restricciones tiene que ver con el navegador. El usuario deberá utilizar Microsoft Edge, lo que a su vez implica que el equipo tiene que funcionar bajo Windows 10. Esto será así a pesar de que Netflix cuenta con su propia aplicación nativa de Windows 10. También significa que por ahora los usuarios de Mac no podrán aprovechar esta nueva característica.
La segunda condición tiene que ver con la pantalla. Obviamente el usuario necesitará de una pantalla con la capacidad para mostrar contenido a resolución nativa 4K. De esta forma y como afirman varias webs americanas, no parece que su pueda hacer uso del servicio bajo QHD u otras resoluciones intermedias.
La última condición tiene que ver con el interior de los equipos. El ordenador en cuestión deberá tener un procesador Intel de séptima generación (Kaby Lake). Esto significa que ni siquiera el nuevo Surface Studio (que cuenta con pantalla 4.500 x 3.000) podría hacer uso de Netflix en 4K. Se trata de una limitación extrema que permitirá el acceso a la resolución a un número muy pequeño de usuarios.
En cualquier caso es una buena noticia que Netflix ya se pueda disfrutar en 4K para algunos PC. Es de suponer que con el paso de los meses la compañía ofrezca nuevas especificaciones y amplíe el número de sistemas operativos para disfrutar de sus contenidos con la máxima calidad.
Actualización: La protección anticopia explicaría los elevados requisitos técnicos. Edge es el único navegador con
PlayReady y los Kaby Lake son los únicos procesadores con decodificación HEVC de 10 bits que funcionan con PlayReady, dificultando la captura no autorizada de vídeo.
Fuente: The Next Web