No sería de extrañar que durante los próximos años las televisiones con resoluciones 4K se impongan a las Full HD en el mercado. Basándose en esta reflexión durante el pasado Consumer Electronic Show (CES), que se celebró el pasado mes de enero, el director de productos de Nelflix Neil Hunt aseguró que tanto Sony como Microsoft estarían preparando soporte para vídeo 4K en sus consolas de última generación, y que ambas se actualizarían a finales de 2015.
Según declaraciones del propio Hunt, “Tradicionalmente la revisión de las consolas llega cada dos años de su ciclo de vida, la siguiente nos traerá vídeo a 4K”. Hay que tener en cuenta que Netflix es, posiblemente, el proveedor más importante de contenido 4K en los Estados Unidos, por lo que sus declaraciones no son desinteresadas.
Los reporteros de
Forbes han contactado con ambas compañías, Microsoft y Sony, pero ninguna ha admitido de forma abierta que esté trabajando en una revisión de hardware para soportar vídeo en 4K. Sin embargo Sony ha abierto la ventana a los rumores con sus declaraciones: “El soporte 4K para fotos y vídeos está en consideración, pero no tenemos absolutamente nada que compartir al respecto”. Por su parte Microsoft tampoco ha desmentido el rumor: “Seguimos comprometidos en llevar a la sala de estar servicios de entretenimiento. Más allá de eso, no tenemos nada más que comentar en este momento”.
El propio artículo de Forbes hace una reflexión sobre las declaraciones de Netflix, Microsoft y Sony: “Si las predicciones de Netflix se hacen realidad este año y las consolas añaden tecnología 4K, es casi seguro que que sólo se aplicará a la reproducción de vídeo. Los juegos 4K van a seguir siendo exclusivamente para los propietarios de un PC de gama alta". Como el próximo
GTA V, que admitirá resoluciones a 4K a 60fps.
No debemos olvidar que previamente al lanzamiento de ambas consolas los responsables tanto de Sony como de Microsoft afirmaron que sus maquinas serían capaces de
soportar resoluciones 4K, en el caso de Xbox One
incluso en juegos. Sin embargo, proveedores de contenido 4K como Netflix y Amazon utilizan un formato de codificación (HEVC 4K UHD) que podría requerir la inclusión de un chip dedicado, además de aprovechar una posible revisión para incluir un puerto HDMI 2.0 necesario para reproducir vídeo 4K a 60fps.