Esto es como cuando éramos pequeños y los padres no entendían porqué queríamos juegos nuevos si ya tenemos un montón.
No se trata de la cantidad, si no del interés que tengas en x videojuegos.
A mi en particular no me suelen gustar los indies, ni los assassin, ni los Battle Royale, ni los juegos estilo Dark Souls (eso de tener que morir sí o sí recorriéndote el mapa una y otra vez, por muy hábil que seas, no lo soporto) ni la mayoría de FPS.
Lo cual me deja una buena cantidad de títulos a los que jugar, pero con el tiempo se van acabando los pendientes.
Llegado un momento, ya me quedo sin títulos que me gustan, por lo cual ya tengo que empezar a jugar a los que no me gustan, es natural que ya desee jugar a cosas más modernas que sí me interesan. Y como yo, habrán muchos en la misma situación.
Otra cosa son las quejas. En mi caso, me he quejado algunas veces del trolleo constante del tipo: “mirad lo que tengo mortales, es una pasada y estoy jugando a todo, ojalá lo tuvierais también, pero como lo tengo yo solo, pues morderos las uñas”, pero nunca lo he hecho porque no avanzase la cosa, es una cuestión de elección, o cosas nuevas y online o scene.