Tenemos una muy mala costumbre de pensar que lo que no beneficia, perjudica y eso no es así.
¿Me beneficia a mí que tu te compres mañana un juego? ¿Me perjudica entonces, ya que no me beneficia? Pues si las dos respuestas son NO (que es de cajón que son NO), no se puede hacer ese tipo de vínculos.
Cuando tu compras un juego, adquieres dos cosas: por un lado el formato físico y por otro el derecho a disfrutarlo en tu consola (que va unido a ese medio físico).
Por tanto si yo vendo de Segunda Mano un juego, estoy vendiendo el formato físico y traspasando mi derecho al disfrute a otra persona ¿Donde está la perdida?.
Seguro que tu piensas: "Es que al comprar el otro señor el juego de segunda mano, la compañía deja de recibir dinero de ese segundo señor".
Pero te equivocas, porque la compañía YA ha recibido el dinero por ese disfrute que no está a nombre de "Don pepito", si no que es un derecho que tiene el señor dueño del medio físico original, que es un objeto que puedes vender como cualquier otro objeto que tengas. Y lo que deje de recibir, no es un perjuicio, al igual que no es un perjuicio que yo no vaya nunca al Burguer King a comer una Hamburguesa y a lo mejor su cliente medio, va una vez por semana ¿Me acusarás de perjudicar al Burguer King por no ir?
Seamos coherentes y hablemos bien: la piratería consiste en vender copias de los juegos sin autorización de los dueños, lucrándose otra persona en vez de los dueños y es un delito perseguido y por el que puedes acabar en la carcel.
Bajarse un juego por internet, NO es piratería pero puede ser denunciado por la vía civil pues obviamente, los autores del juego dejan de percibir la cantidad correspondiente al derecho a disfrute de ese juego que hemos bajado, lo cual SI que es un perjucio a la compañía.
Y ojo con esto, porque las descargas, no perjudican a las tiendas que dejan de vender copias físicas de juego.
Todo esto entendiendo la palabra perjuicio por lo que es en este caso: Detrimento patrimonial que debe ser indemnizado por quien lo causa, porque otro uso ambiguo o incorrecto (no ser benificioso equipararlo a perjuicio), no es válido.