gatosamurai escribió:no se si es una referencia a la broma del silent hill 3 sobre el silent hill 2 ( toma ya xDD )
Pues mira ahí me gustaría saber si le ha salido a alguien sin tener una partida finalizada en la tarjeta de sh2 y sh3. Pero pienso que es lo que tu comentas. (Sólo a una mente enferma se le ocurriría meter la mano ahí)
No hay nada para poneros los dientes largos, pero seguro que a más de unos se le ponen tratando de mirar por el aguero de la pared mientras la moza se maquilla.
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Por cierto, no te preocupes por lo de Radar... jajaja.
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Pues efectivamente el juego es como recorrer dos veces los mismo lugares, con modificaciones por supuesto. Yo creo que puede resultar en la 'segunda vuelta' algo cansado pero más que nada por la angustia y agobio que imprime el juego y por ser más difícl que el 2 y sobre todo el 3. En todo caso, realmente sí hay cosas completamente nuevas en la segunda vuelta, lo que ocurre que tendemos a pensar que es otra vez lo mismo.
Personalmente el juego me parece que está a la altura de la entrega original de PSX y, como ya dije, podría por si mismo llamarse The Room y ser un juegazo, sin tirar para nada de la fama de 'Silent Hill' (claro que, estoy seguro de que la saga SH se siente muy orgullosa de su 4ª entrega, porque todo el que la ha probado ha quedado más que satisfecho... supongo que en unos meses la cosa estallará a nivel comercial y mundial)
Cucus, si tú le hubieras dado un sobresaliente de haber aparecido la ciudad, yo se lo concedo, aunque bajo (un 9) entre otras cosas por no apoyarse descaradamente, de nuevo, en SH (psx). Por introducir elementos novedosos en la saga y conseguir una integración pluscuamperfecta. Por haberme vuelto a mantener pegado al sillón noche tras noche como 'la primera vez' (juas). Por no utilizar en exceso elementos superfluos al motor del juego que aunque muy llamativos la mayor parte de las veces no son más que 'paja'. Por elevar la dificultad y la sensacional idea de no poder matar a todos los enemigos. En definitiva, el punto que le falta nos lo debe Yamaoka, que en su papel de director ejecutivo parece que no ha considerado oportuno agasajarnos con alguna composición melódica más (ojo, la ambientación del juego es magistral).
Sólo he jugado una vez. Pero sospecho que tiene más de un final.
Agur.