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Blawan escribió:Ahora traslada esto al reguetón o al trap y preguntate si a Hasel lo ha llevado a la fama estadios llenos de admiradores o la prensa y los políticos.
Y dime en serio que es mas peligroso un concierto de Hasel con 200 personas o que esté Abasal echando de menos el "gobierno" de hace 80 años con 52 diputados en el parlamento.
Que estamos hablando de que los twitts de Echenique también son peligrosos.
Huele demasiado el tema. Todo lo que "huela" a rojo es peligroso. Esa es la idea de fondo. Y es descarado.
Blawan escribió:¿hay que prohibir la música para así no ofender a nadie?
Blawan escribió:A este Hasel lo critica la gente que legitima a los borbones, que apoya los palos indiscriminados de la policía...que casualidad oye.
¿cuál es la legitimación de los borbones para estar donde están?
Entre Hasel y Echenique tienen que estar acojonados. ¿O mas bien estarán descojonándose?
rhipone escribió:@Quintiliano déjalo, no entrará jamás en razón, es un burro que va a lo que le dicen, sin informarse de nada, solo hay que ver los juicios que hace.
Y así son todos los tontos que están en las calles defendiéndolo, sin tener ni idea de lo que ha hecho.
Entiendo que a esa gente les gustaría que se les sometiera a una presión social 24h donde se les desease la muerte
Blawan escribió:Como el hilo va de la libertad de expresión te diré que si en este foro pones eso sobre la gente de derechas, ya tendrías unos cuantos reportes y probablemente estarías baneado a estas horas.
Blawan escribió:A este Hasel lo critica la gente que legitima a los borbones, que apoya los palos indiscriminados de la policía...que casualidad oye.
¿cuál es la legitimación de los borbones para estar donde están?
Entre Hasel y Echenique tienen que estar acojonados. ¿O mas bien estarán descojonándose?
Galicha escribió:dlabo escribió:Perdona, pero lo que es frivolizar es decir que el terrorismo tardofranquista es un policía aislado que se le fue la mano o 4 mossos que se hayan cargado a un tío.
¿A qué te refieres con terrorismo tardofranquista?
A ver si me he perdido algo pero la mayor banda terrorista que ha habido en España ha sido la ETA con muchísima diferencia, con mucha distancia andaban por allí el GRAPO, el FRAP, Terra Lliure, etc.
Y luego tenemos el terrorismo de Estado que fue una barbaridad, que unos cuantos han pagado con prisión y con el descrédito de la sociedad, a diferencia de la ETA que todavía muchos miembros son "héroes nacionales". Igual yo soy raro pero no recuerdo una manifestación en apoyo de Amedo y Domínguez como héroes patrios.
No frivolicemos y no confundamos términos. ¿que algunos en la derecha quieren seguir sacando rédito electoral a la ETA? Sí, claro, pero eso no tiene nada que ver con que la ETA ha sido una putada en España y hay que tratar el tema con el debido respeto.
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Galigari escribió:
Palos , la policía tendria que tener la tonfa rota cada dia y 50 policias en rehabilitación de brazo por dia de repartir.
Los Borbones los tienes legitimados en la constitución.
Hasel delincuente y Echenique otro delincuente, yo de ti me miraria otros referentes ...
Si Pablo Hasél fuera un ultraderechista, si sus letras y tuits no atacasen al Rey o a las víctimas del terrorismo sino a las feministas, los inmigrantes o los homosexuales; si en vez de hablar de tiros en la nuca a Patxi López pusieran la diana en el cogote, yo qué sé, de Otegi; si se mofase de las víctimas del GAL como se mofó de las de ETA; si la hubiera emprendido a puñetazos con periodistas que intentaban informar no de su encierro okupa en la Universidad de Lleida, sino, yo qué sé, de un aquelarre neonazi lleno de esvásticas; si en vez de fotos con Monedero las tuviera con Ricardo Sáenz de Ynestrillas...
Y más: si en las protestas contra su condena hubieran incendiado contenedores y asaltado comercios no “jóvenes idealistas” sino cabezas rapadas; si aparecieran en 13TV tertulianos justificando esta violencia porque “la gente está muy harta”; si la que ha perdido un ojo en las protestas llevase camisa azul, ¡qué divertidos chistes leeríamos, qué hermosas defensas del civismo, qué condenas unilaterales a esta violencia y no “a todas las violencias”, qué de alertas sobre la deriva nihilista y fascista de la sociedad, qué de estudios de la violencia simbólica del lenguaje, sobre el peligro de la cultura y la apología!
Facilitaría mucho las cosas que Pablo Hasél fuera miembro de la ultraderecha. Muy pocos de los que hoy piden su salida del trullo estarían levantando la voz, y el pobre raperillo facha tendría que conformarse con la defensa de cuatro gatos tachados inmediatamente de blanqueadores del fascismo. A mí, en ese caso, también me tendría entre sus defensores. Escribiría arriesgadas columnas intentando justificar que la libertad de expresión es, precisamente, el derecho de quienes nos ofenden a hacerlo sin más riesgo que ser ofendidos por nosotros. Y podéis dar por descontado que me llamarían de todo.
Estos días, sin embargo, sacan listas de represaliados de la libertad de expresión llamativas por sus omisiones. ¿Dónde están los grupos de rock Batallón de Castigo y Más que Palabras, cuyos miembros fueron condenados a un año de cárcel 'por cantar'? ¿Dónde está el colectivo artístico Homo Velamine, al que el Tribunal Supremo condenó a 18 meses de cárcel y una multa de 15.000 euros por el irónico 'tour de la manada', que no era más que una caricatura del amarillismo mediático? ¿Dónde están otros tuiteros y articulistas encarcelados o multados que, en vez de chistes de Carrero Blanco, los hicieron misóginos, xenófobos y demás?
Cuánta hipocresía. Si tu defensa de la libertad de expresión cuenta solo a los perseguidos de tu cuerda, entonces es falsa y acomodaticia. Quienes omiten al que no les gusta de sus listas debieran hablar de autodefensa y jamás de su amor por un derecho fundamental. Si quieres pelear por la libertad de expresión, habrás de mancharte las manos de mierda. Tendrás que ponerte de parte de los que no te gustan con la misma pasión que empleas para los tuyos. Repito, ¡qué fácil sería explicar todo esto si a Pablo Hasél lo hubieran condenado por reírse, yo qué sé, de los fusilados de Franco! Y casi nadie lo entendería.
En fin. Llevo suficientes años en esta batalla para haber visto a muchos de estos amantes de la libertad relativizar el linchamiento y lo que hoy se llama cultura de la cancelación. He visto también cómo intentaban poner cómicos en la picota, cómo alentaban quemas de brujas y cómo celebraban que, por ejemplo, a Jorge Cremades le cerrasen las puertas de los teatros públicos 'por machista'. Los he visto justificar toda clase de atropellos siempre que el mensaje ofendiera sus sentimientos, y ahora pretenden hacerse pasar por nuestra única barrera contra la censura. ¿Dónde estaban estos activistas cuando el atropellado les ofendía?
Lo que estamos viendo estos días no es una defensa de la libertad de expresión, sino una expresión de la polarización política, que algunos dirigentes sin escrúpulos patrimonializan entre grandes palabras hermosas. Se quejan muchos de que el Código Penal los maltrata más que a los fachas, pero no hablan de relajar los castigos en ambas direcciones sino de que los fachas sean castigados, al menos, con el mismo rigor. Así, vemos a Podemos proponiendo derogar el artículo 578 mientras hablan de convertir en un delito el 'negacionismo de la violencia de género' o la apología del franquismo. ¿En qué quedamos?
Dejadme hablaros otra vez de Martin Garbus, abogado norteamericano octogenario al que la revista 'Time' describe como un personaje legendario en la defensa radical de la libertad de expresión y al que ensalcé aquí. Según Garbus, la defensa de la primera enmienda solo es totalmente sincera cuando peleas para que tus enemigos más viles puedan expresar sus ideas. Así, ha defendido a toda clase de personas en aprietos por haber expresado sus ideas, desde Vaclav Havel a Nelson Mandela, pasando por Andrei Sakharov, Salman Rushdie, Lenny Bruce y Al Pacino. También a otros que, 'a priori', deberían caernos peor.
Este abogado hizo algo más llamativo: defendió a un grupo de neonazis norteamericanos que querían manifestarse en un barrio judío
Sus principios son tan sólidos, tan sinceros, que este abogado hizo algo mucho más llamativo: defendió a un grupo de neonazis norteamericanos que querían manifestarse en un barrio judío. Consiguió ganar el juicio, y los neonazis hicieron su turbio desfile en Skokie, Illinois. Olvidé mencionar algo importante: Martin Garbus es judío. Su familia huyó de los pogromos polacos y se instaló en Estados Unidos. Por este motivo lo considero un héroe, y un verdadero referente en la defensa de la libertad de expresión.
Su postura en el caso de los neonazis despertó críticas furibundas contra él por parte de su propia comunidad: esta es la reacción ineludible cuando defiendes, de verdad, la libertad de expresión. En caso contrario, no eres más que un partidista. Cuando, años después, su hija le preguntó cómo se sentía al defender el derecho de manifestación de esos indeseables, un Garbus lacónico y tranquilo dio una respuesta elocuente: “Me utilizan para causas que no comparto, pero también para causas que son importantes para mí”. En HBO, hay un documental sobre él: 'Shouting Fire: Stories from the Edge of Free Speech'. Más de uno debería verlo.
Galigari escribió:Palos, la policía tendría que tener la tonfa rota cada dia y 50 policías en rehabilitación de brazo por dia de repartir.
Los Borbones los tienes legitimados en la constitución.
Hasel delincuente y Echenique otro delincuente, yo de ti me miraría otros referentes ...
[erick] escribió:Creo que al final el hilo, como otros, es para hablar de lo mal o bien que le parece al OP Podemos o Vox
Lo mismo de siempre, vaya.
Goncatin escribió:Me permito poner este artículo de Juan Soto Ivars que resume a la perfección lo que opino de este tema:
https://blogs.elconfidencial.com/socied ... a_2961323/Si Pablo Hasél fuera un ultraderechista, si sus letras y tuits no atacasen al Rey o a las víctimas del terrorismo sino a las feministas, los inmigrantes o los homosexuales; si en vez de hablar de tiros en la nuca a Patxi López pusieran la diana en el cogote, yo qué sé, de Otegi; si se mofase de las víctimas del GAL como se mofó de las de ETA; si la hubiera emprendido a puñetazos con periodistas que intentaban informar no de su encierro okupa en la Universidad de Lleida, sino, yo qué sé, de un aquelarre neonazi lleno de esvásticas; si en vez de fotos con Monedero las tuviera con Ricardo Sáenz de Ynestrillas...
Y más: si en las protestas contra su condena hubieran incendiado contenedores y asaltado comercios no “jóvenes idealistas” sino cabezas rapadas; si aparecieran en 13TV tertulianos justificando esta violencia porque “la gente está muy harta”; si la que ha perdido un ojo en las protestas llevase camisa azul, ¡qué divertidos chistes leeríamos, qué hermosas defensas del civismo, qué condenas unilaterales a esta violencia y no “a todas las violencias”, qué de alertas sobre la deriva nihilista y fascista de la sociedad, qué de estudios de la violencia simbólica del lenguaje, sobre el peligro de la cultura y la apología!
Facilitaría mucho las cosas que Pablo Hasél fuera miembro de la ultraderecha. Muy pocos de los que hoy piden su salida del trullo estarían levantando la voz, y el pobre raperillo facha tendría que conformarse con la defensa de cuatro gatos tachados inmediatamente de blanqueadores del fascismo. A mí, en ese caso, también me tendría entre sus defensores. Escribiría arriesgadas columnas intentando justificar que la libertad de expresión es, precisamente, el derecho de quienes nos ofenden a hacerlo sin más riesgo que ser ofendidos por nosotros. Y podéis dar por descontado que me llamarían de todo.
Estos días, sin embargo, sacan listas de represaliados de la libertad de expresión llamativas por sus omisiones. ¿Dónde están los grupos de rock Batallón de Castigo y Más que Palabras, cuyos miembros fueron condenados a un año de cárcel 'por cantar'? ¿Dónde está el colectivo artístico Homo Velamine, al que el Tribunal Supremo condenó a 18 meses de cárcel y una multa de 15.000 euros por el irónico 'tour de la manada', que no era más que una caricatura del amarillismo mediático? ¿Dónde están otros tuiteros y articulistas encarcelados o multados que, en vez de chistes de Carrero Blanco, los hicieron misóginos, xenófobos y demás?
Cuánta hipocresía. Si tu defensa de la libertad de expresión cuenta solo a los perseguidos de tu cuerda, entonces es falsa y acomodaticia. Quienes omiten al que no les gusta de sus listas debieran hablar de autodefensa y jamás de su amor por un derecho fundamental. Si quieres pelear por la libertad de expresión, habrás de mancharte las manos de mierda. Tendrás que ponerte de parte de los que no te gustan con la misma pasión que empleas para los tuyos. Repito, ¡qué fácil sería explicar todo esto si a Pablo Hasél lo hubieran condenado por reírse, yo qué sé, de los fusilados de Franco! Y casi nadie lo entendería.
En fin. Llevo suficientes años en esta batalla para haber visto a muchos de estos amantes de la libertad relativizar el linchamiento y lo que hoy se llama cultura de la cancelación. He visto también cómo intentaban poner cómicos en la picota, cómo alentaban quemas de brujas y cómo celebraban que, por ejemplo, a Jorge Cremades le cerrasen las puertas de los teatros públicos 'por machista'. Los he visto justificar toda clase de atropellos siempre que el mensaje ofendiera sus sentimientos, y ahora pretenden hacerse pasar por nuestra única barrera contra la censura. ¿Dónde estaban estos activistas cuando el atropellado les ofendía?
Lo que estamos viendo estos días no es una defensa de la libertad de expresión, sino una expresión de la polarización política, que algunos dirigentes sin escrúpulos patrimonializan entre grandes palabras hermosas. Se quejan muchos de que el Código Penal los maltrata más que a los fachas, pero no hablan de relajar los castigos en ambas direcciones sino de que los fachas sean castigados, al menos, con el mismo rigor. Así, vemos a Podemos proponiendo derogar el artículo 578 mientras hablan de convertir en un delito el 'negacionismo de la violencia de género' o la apología del franquismo. ¿En qué quedamos?
Dejadme hablaros otra vez de Martin Garbus, abogado norteamericano octogenario al que la revista 'Time' describe como un personaje legendario en la defensa radical de la libertad de expresión y al que ensalcé aquí. Según Garbus, la defensa de la primera enmienda solo es totalmente sincera cuando peleas para que tus enemigos más viles puedan expresar sus ideas. Así, ha defendido a toda clase de personas en aprietos por haber expresado sus ideas, desde Vaclav Havel a Nelson Mandela, pasando por Andrei Sakharov, Salman Rushdie, Lenny Bruce y Al Pacino. También a otros que, 'a priori', deberían caernos peor.
Este abogado hizo algo más llamativo: defendió a un grupo de neonazis norteamericanos que querían manifestarse en un barrio judío
Sus principios son tan sólidos, tan sinceros, que este abogado hizo algo mucho más llamativo: defendió a un grupo de neonazis norteamericanos que querían manifestarse en un barrio judío. Consiguió ganar el juicio, y los neonazis hicieron su turbio desfile en Skokie, Illinois. Olvidé mencionar algo importante: Martin Garbus es judío. Su familia huyó de los pogromos polacos y se instaló en Estados Unidos. Por este motivo lo considero un héroe, y un verdadero referente en la defensa de la libertad de expresión.
Su postura en el caso de los neonazis despertó críticas furibundas contra él por parte de su propia comunidad: esta es la reacción ineludible cuando defiendes, de verdad, la libertad de expresión. En caso contrario, no eres más que un partidista. Cuando, años después, su hija le preguntó cómo se sentía al defender el derecho de manifestación de esos indeseables, un Garbus lacónico y tranquilo dio una respuesta elocuente: “Me utilizan para causas que no comparto, pero también para causas que son importantes para mí”. En HBO, hay un documental sobre él: 'Shouting Fire: Stories from the Edge of Free Speech'. Más de uno debería verlo.
Goncatin escribió:@dlabo Tu comentario es el vivo ejemplo de que Soto Ivars tiene razón. El “no es lo mismo” que tanto gusta para hablar de los delitos de opinión que si gustan vs los delitos de opinión que no gustan
Goncatin escribió:Me reafirmo en lo dicho. Los delitos de opinión están bien para censurar la opinión del bando contrario. Todos cortados por el mismo patrón.
dlabo escribió:Goncatin escribió:Me reafirmo en lo dicho. Los delitos de opinión están bien para censurar la opinión del bando contrario. Todos cortados por el mismo patrón.
Entonces ¿para ti hasel no debería estar en la cárcel por ahora?
Blawan escribió:¿habeis leído a alguien que pida respeto para Echenique?
Aevum escribió:bueno, hay políticos específicos se se han convertido en objeto de broma en todos lados.
Echenique por su Invalidez
Mariano rajoy por sus famosas frases
Irene Montero por no tener ningún contacto con la realidad.
Alberto Rivera por su afición a la coca.
Carmen Calvo por su feminismo elitista.
Pablo Casado por hacer el ridículo constantemente.
Santiago Abascal Intentar hacerse el macho y hacer el ridículo.
el asunto es depende de tu punto de vista y afinidad política, a uno lo ves como una broma inofensiva y otro como ofender y perseguir a tus líderes políticos.
Personalmente ? son personajes públicos y siempre serán objetivos de bromas y rumores, el asunto cuando se cruza la línea entre radio patio y acosar a la persona de algo serio que podría repercutir.
clamp escribió:Galigari escribió:Palos, la policía tendría que tener la tonfa rota cada dia y 50 policías en rehabilitación de brazo por dia de repartir.
Los Borbones los tienes legitimados en la constitución.
Hasel delincuente y Echenique otro delincuente, yo de ti me miraría otros referentes ...
ya te pongo la base
Aevum escribió:Y han amenazado testigos o dado palizas a reporteros de TV3 ?
Porque aquí se esta repitiendo una tras otra vez el mantra que Pablito está en la cárcel por injurias al rey, cuando tiene una lista de la compra de gilipolleces que ha hecho .
Blawan escribió:Uno que está disfrutando mucho ultimamente de la libertad de expresión es Echenique, al que llaman de todo.
¿habeis leído a alguien que pida respeto para Echenique?
Pues eso.
Pero cuando se le toca al Rey o al terrorismo, 2 de los principales temas que sustentan a la derecha en España, es cuando empiezan los problemas.
Casualidades.
En España estamos acostumbrados a que la gente de derechas decida lo que está bien y lo que está mal. Es a lo que estamos acostumbrados y por lo que los Hasel o Echenique generan tanto ruido y animadversión.
Joer, si sólo hay que ver esa comparación sobre un rapero de ultraderecha.
Díganle a ese articulista que varios temas relacionados con los nazis son delito, que la homofobia en el siglo XXI está superada en muchos países y que estamos en un país en el que Vox tiene 50 diputados, para el tema del racismo.
En lo que si estoy de acuerdo en en lo de la polarización: porque cuanto mas libertad quiere la gente de izquierdas, mas ganas de sacar el cinto le dan a los derechas.
¿por qué? En mi opinión porque la derecha viene de escribir la historia de España y eso está cambiando.
En cualquier otro tema a nivel legal, la libertad de expresión está muy delimitada, con todo tipo de ejemplos y casos.
Pero la libertad de expresión en el tema político, somos casi unos recién nacidos. Al fin y al cabo, sólo van 50 años de democracia.
rhipone escribió:@dlabo que no ha tenido consecuencias? O es que no interesa que se publiquen?
Hoy en dia la izquierda radical vende, al igual que la derecha vende, de ahi todo el bombo que le dan a VOX.
Pero es que los unicos que salen a destrozar locales, robar, atacar a la policia, son estos, y no veas como le gusta a la prensa.
La mitad de los que van a esos sitios no irian si no se le da el bombo que se le da
Goncatin escribió:dlabo escribió:Goncatin escribió:Me reafirmo en lo dicho. Los delitos de opinión están bien para censurar la opinión del bando contrario. Todos cortados por el mismo patrón.
Entonces ¿para ti hasel no debería estar en la cárcel por ahora?
Para mi limitar la libertad de expresión según qué cosas, como lo que canta Hasel o como lo que dicen los neonazis está bien, tanto para un bando como para otro. Pero como para cárcel no, con multas coercitivas estaría bien, aumentando su importe si se es reincidente.
Así que en mi opinión, si, Hasel no debería estar en la cárcel. Multado si, pero no en la cárcel.
Lo que quería señalar es la hipocresía de los "no es lo mismo"