Iba yo en metro en Madrid (En asturias nunca he visto esto) con un amigo, una persona de 2 metros y 130 kilos de peso. Y en Otoño, se montó un tio con un collar de piedritas, CHANCLAS y pelo engominado, iba con otro amigo suyo, se sentaron delante nuestro, y empezó a sonar una voz de una tipa, como si fuese dobladora de cine porno, y un "chum chum chum chunda chum chunda chunda", amablemente me levanté y le dije que me molestaba su música.
El tio, que probablemente habia ingerido cantidades industriales de helio antes de subirse al metro (o sino no me explico su tono de voz), dijo "Chiquillo esto es lo que se lleva, mira como mola!" Y me lo pone en la oreja.
Habiamos pillado el metro en Villaverde Bajo, estos especimenes, se habian subido en la siguiente parada, y en la siguiente, mi colega y yo, decidimos ahorrar sufrimiento al vagón entero, cogimos sus mochilas, las tiramos fuera del tren, y no les quedo mas cojones que ir por ellas, obviamente el tren habia cerrado las puertas.
No faltó lo tipico de "Me roban!! Os voy a matar hijos de puta!!!" Blabla
Me despedí de ellos dos con un beso y no supe más de sus vidas.
ODIO a los putos payasos (con respeto hacia los payasos) que hacen este tipo de cosas, al igual que odio al bakala con el coche tuneado /mode stereo on