Madre de Dios, eso es que no habéis pasado del principio. Lo único que le puedo criticar al Shining Force de Saturn es un argumento con demasiadas intrigas políticas y que los personajes hablan más que mi madre. Pero el juego, contando los tres escenarios, es una puta maravilla nunca sobrepasada en su género (ni lo será, gracias a lo mal que se llevan ahora Sega y Camelot y a que los Fire Emblem ya dejaron de ser una referencia en el género que ellos mismos inventaron). Recuerdo la batalla de los trenes y los refugiados y me entran ganas de arrear espadazos a diestro y siniestro, menudo orgasmo jugable es ese juego. Lo malo es que el escenario más flojo es el único que llegó a occidente, los otros dos mejoran mucho la historia y los gráficos, que las batallas del primero eran un festival de clipping.
Sega, te odio.