Los grandes operadores europeos
llevan años pidiendo a los gobiernos que las grandes tecnológicas contribuyan al coste de las redes, una iniciativa que hasta ahora no ha tenido éxito. A pesar de ello, José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica, no se rinde y propone dos escenarios: que las grandes tecnológicas hagan un uso responsable de la red o paguen por el tráfico de datos.
En una entrevista a
El Mundo, Pallete afirma que en su día perdieron el debate de que los gigantes tecnológicos pagasen por el uso de la red “porque nuestros clientes no querían ese debate”, pero ahora dice que tienen un nuevo enfoque. El ejecutivo sostiene que cada año el tráfico de datos crece un 30 %, y asegura que “más del 50% del tráfico de datos que va por nuestras redes lo consumen cinco grandes compañías que no pagan nada por ello”. “No quiero su dinero, pero sí que tengan un incentivo para hacer un uso razonable de la red”, añade.
Pallete considera que las redes son un recurso compartido y que ellos las despliegan para todos. El presidente de Telefónica lamenta que los gigantes tecnológicos no tienen “ningún incentivo a hacer un uso razonable y diseñan sus productos y servicios como si la red fuera ilimitada”, un comportamiento que “nos fuerza a invertir desproporcionadamente en capacidad”. “No es necesario que el tráfico de datos crezca un 30 % cada año, pero lo hacemos, así que queremos que nos devuelvan nuestro dinero, Telefónica y otros invierten en que haya autopistas, no para que nadie les añada otro carril”, comenta el ejecutivo.
Para Pallete la solución es un plan a dos años vista. Quien consuma más de un 5 % del tráfico de la red tendrá un bienio para situarse por debajo y en caso de no conseguirlo tocaría hablar de una “compensación”. “En resumen, decimos a estos gigantes: hagan ustedes un uso responsable de la red como todos los demás y, si no lo hacen, paguen por ella porque es un bien escaso”, dice Pallete.
Durante la entrevista el presidente de Telefónica también
pide la desregularización como operador dominante “porque los motivos por los que se nos reguló han dejado de existir”. Este deseo se podría cumplir si finalmente la Unión Europea aprueba la
fusión entre Orange y MásMóvil que daría vida a una compañía que en España superaría a Telefónica en clientes de banda ancha.