Son las seis de la mañana y no puedo dormir ¿la razón? anoche terminé The Last Guardian.
He jugado muchísimos juegos, muchos de ellos me han hecho sentir muchas cosas, reírme, emocionarme, asustarme... pero ninguno lo ha conseguido hasta tal grado como The Last Guardian. No pienso hacer ningún spoiler, pero ha habido momentos en los que me he agobiado, momentos en los que me he alegrado muchísimo y he sonreído de oreja a oreja, y sobretodo he llorado, muchísimo, a moco tendido.
No sé si habrá alguien que me lea con dudas de si comprarlo, pero si es así, olvida las especificaciones técnicas, olvida la duración, olvida los problemas que tiene con la cámara y las pequeñas caídas de frames, The Last Guardian es más profundo que eso, te ofrece formar parte de una historia que (creo que hablaré por muchos) costará olvidar tanto o más que lo que hemos esperado por esta obra. Trico te hace sentir cosas que ningún juego me ha hecho sentir en toda mi vida y ya no soy ningún crío. Conforme pasan las horas te sientes conectado a la criatura, si consigues sumergirte en el juego, habrá un momento muy especial, un momento en el que pensarás: "Trico está vivo", se te olvida que está formado por códigos, que es una IA, hay un momento en el que Trico es uno más de este mundo, y a partir de entonces, es cuando el juego llega a su punto cúspide.
Tal vez me esté pasando de sensiblero, tal vez sea un exagerado, pero me ha hecho sentirme así, y solo por eso, me parece un juego que todo el mundo debería al menos darle una oportunidad.
Gracias Fumito Ueda por esos 10 años de duro trabajo y sacrificios, han merecido la pena, una historia inolvidable... nuestra historia.