Tras varias semanas sin declaraciones oficiales sobre el
culebrón de la compra de Ono por parte de Vodafone, la operadora británica ha confirmado la operación que
adelantaba El Confidencial el viernes pasado. Finalmente Vodafone ha cerrado el trato por 7.200 millones de euros, iniciando el proceso de adquisición que terminará durante el tercer trimestre de 2014 y convirtiéndose así en el segundo mayor teleoperador en el mercado de banda ancha fija en España.
En un
comunicado de la empresa se menciona la infraestructura que aporta la adquisición de Ono incluyendo una red de banda ancha que llega a "más de 7 millones de unidades inmobiliarias" y que "ofrece ya velocidades
por encima de 200 Mbps". Según la operadora británica, Ono aportará a su cartera los 1,9 millones de clientes que disfrutan de los diferentes servicios de la empresa adquirida.
Vodafone también
indica que la adquisición de Ono aumentará su oferta de modalidades con servicios unificados en España, país que según el Consejero Delegado del Grupo Vodafone, Vittorio Colao, es uno de los más convergentes de toda Europa. En la misma rueda de prensa, Vodafone ha confirmado además que sus primeras
ofertas de FTTH llegarán durante el próximo mes de abril, sin revelar precios o cobertura.
Respecto a la expansión de la fibra óptica de Vodafone, la operadora ha revelado que se valdrá de su reciente adquisición pero extenderá su red allá a donde Ono todavía no tenga presencia. El objetivo final de Vodafone es conseguir servir con su red a 10 millones de hogares con conexiones de nueva generación, 7 millones de la red de Ono y 3 de su red propia. Una cifra que rivalizará con el proyecto de Telefónica para llegar a
8,5 millones al terminar el presente año.
"La demanda de productos y servicios de comunicaciones unificadas se ha incrementado significativamente en los últimos años en España, y esta operación, junto con nuestro programa de fibra hasta el hogar, acelerará nuestra capacidad de ofrecer las mejores ofertas integradas",
señaló Colao.