Solid.Snake escribió:@LoSJaVieR95 y
@Yui Shojei, perdonad que me meta en vuestra conversación, pero soy abogado y economista y no me he podido resistir.
Y ya en general, para quien quiera saber la diferencia entre lo que es legal y lo que no aquí lo explico:
Legal = tiene que haber una ley de derecho público, es decir, una norma recogida en algún código del Estado. Los jueces, policías y ministerio público intervienen como parte interesada de oficio (interviene, investiga y juzga automáticamente).
Para ser algo ilegal tiene que haber un delito y si no hay ley de derecho público no hay delito. Si no hay delito es legal sí o sí (hablando en propiedad alegal
).
Luego están las leyes de derecho privado, en las que no interviene el Estado de oficio, la cosa es entre particulares (el Estado no se mete automáticamente, solo interviene como mediador a instancia de parte, es decir, por petición de alguna de las partes implicadas mediante querella, que no es lo mismo que una denuncia).
Cuando se incumple una norma de derecho privado no se está cometiendo un delito de primeras, sino un ilícito, que no es lo mismo que ilegal, aunque algunas veces puede coincidir que el ilícito lleve a un delito y por tanto sea ambas cosas. Y esto,
"que no ocurre tan a menudo" es lo que hace a muchos
confundir ambos términos y usarlos erróneamente como sinónimos cuando realmente sí hay diferencia de significado entre ellos. Pero hasta los diccionarios cometen este error al basarse en el plano moral y no recoger el verdadero significado en el plano jurídico, es decir, el significado técnico que tiene en el ambiente jurídico, en la jerga de los abogados, jueces, etc.
Resumiendo, en principio, el ilícito no tiene que ver con la ley estatal, sino entre particulares mediante contratos u otros instrumentos, no constituyendo un delito en principio, el cual es lo indispensable para considerar algo legal o ilegal. Es más, como ya mencionó arriba
@yobrizo , la propia norma en un contrato puede ser ilegal si contradice una ley estatal.
Este mal uso del significado de las palabras se da mucho hoy día. Estoy alto por ejemplo de ver como la gente usa palabras como pródigo (dilapidador) con otros significados. En la parábola del hijo pródigo, el hijo no era pródigo porque volvía a casa, sino porque se había fundido toda la pasta.