En contra de lo que creen algunos, el iPod touch todavía existe. Y Apple tiene buenos motivos para que siga siendo así. Por más que sus ventas no sean las de antaño (de hecho, hace años que desconocemos sus cifras), el uso de un hardware sobradamente amortizado deja sin duda un margen de beneficios más que generoso, a lo que se suma su valor como plataforma de acceso a los servicios de Apple. Por ello sigue siendo un producto vigente, y más aún tras su última actualización.
Recién anunciado por Apple, el iPod touch de séptima generación celebra la llegada del chip A10 Fusion, que incrementa notablemente las capacidades de procesamiento del dispositivo. De esta forma, ya no solo es capaz de reproducir contenidos multimedia y ejecutar ciertas aplicaciones, sino que también puede ofrecer realidad aumentada y conversaciones en grupo vía FaceTime asumiendo que esté conectado por Wi-Fi.
Apreciado en gran medida por deportistas que no quieren entrenar con un teléfono convencional ni pueden contar por tanto con una conexión de datos, el iPod touch complementa sus posibilidades de streaming con un almacenamiento interno que ahora alcanza los 256 GB. También es adecuado para juegos, especialmente ahora que ofrece tres veces el rendimiento gráfico del modelo anterior según los cálculos de Apple.
Por supuesto, este salto en prestaciones no debería sorprendernos si se considera que el modelo saliente se actualizó en 2015 y está directamente emparentado con el iPhone 6. Dado su nuevo procesador, el iPod touch se equipararía ahora a un iPhone 7.
Por lo demás, el iPhone touch de séptima generación es básicamente un reflejo de su antecesor. Esto implica el uso de una pantalla de 4 pulgadas IPS de 1136 x 640 píxeles, cámaras de 8 y 1,2 megapíxeles, conectividad Wi‑Fi 802.11a/b/g/n/ac y Bluetooth 4.1, Siri y minijack para auriculares. La duración de la batería se estima en 40 horas de reproducción de música y 8 horas de vídeo. En caso de que haya dudas, no hay lector Touch ID.
El nuevo iPod touch ya está a la venta. El modelo de 32 GB cuesta 239 euros, el de 128 GB sale por 349 euros y el de 256 GB tiene un precio de 459 euros.
Recién anunciado por Apple, el iPod touch de séptima generación celebra la llegada del chip A10 Fusion, que incrementa notablemente las capacidades de procesamiento del dispositivo. De esta forma, ya no solo es capaz de reproducir contenidos multimedia y ejecutar ciertas aplicaciones, sino que también puede ofrecer realidad aumentada y conversaciones en grupo vía FaceTime asumiendo que esté conectado por Wi-Fi.
Apreciado en gran medida por deportistas que no quieren entrenar con un teléfono convencional ni pueden contar por tanto con una conexión de datos, el iPod touch complementa sus posibilidades de streaming con un almacenamiento interno que ahora alcanza los 256 GB. También es adecuado para juegos, especialmente ahora que ofrece tres veces el rendimiento gráfico del modelo anterior según los cálculos de Apple.
Por supuesto, este salto en prestaciones no debería sorprendernos si se considera que el modelo saliente se actualizó en 2015 y está directamente emparentado con el iPhone 6. Dado su nuevo procesador, el iPod touch se equipararía ahora a un iPhone 7.
Por lo demás, el iPhone touch de séptima generación es básicamente un reflejo de su antecesor. Esto implica el uso de una pantalla de 4 pulgadas IPS de 1136 x 640 píxeles, cámaras de 8 y 1,2 megapíxeles, conectividad Wi‑Fi 802.11a/b/g/n/ac y Bluetooth 4.1, Siri y minijack para auriculares. La duración de la batería se estima en 40 horas de reproducción de música y 8 horas de vídeo. En caso de que haya dudas, no hay lector Touch ID.
El nuevo iPod touch ya está a la venta. El modelo de 32 GB cuesta 239 euros, el de 128 GB sale por 349 euros y el de 256 GB tiene un precio de 459 euros.
Un iPhone tiene bastantes más sensores y componentes, además de unos marcos más finos, cámaras más complejas y un procesador con unos requisitos de disipación bastante diferentes. Aunque todos sepamos que Apple no mete el jack porque prefiere vender auriculares Bluetooth.
Por otro lado, me fascinan esos precios de Astell&Kern de acceso. Quiero decir, si son esos es porque la gente los paga.
Lo decía de coña la verdad XD
De todas maneras es Apple, ya sabemos que se paga la marca tambien aunque debo decir que en su día los ipod touch estaban muy bien, ahora no les veo mucho sentido más allá de tenerlo para los niños