“Desde su presentación hace ya más de 20 años, el iPod ha cautivado a usuarios de todo el mundo que quieren llevar su música a todas partes”, dice Apple en su comunicado. “En la actualidad, esa misma experiencia está disponible en todos los dispositivos de Apple, desde el iPhone y el Apple Watch hasta el iPad y el Mac, que dan acceso a los más de 90 millones de canciones y las más de 30.000 playlists disponibles en Apple Music”. El iPod nació para que Apple pudiera tener un reproductor de música MP3 y muere en manos del streaming.
iPod de primera generación.La desaparición de iPod pone fin a una era que para muchos hace tiempo que se encuentra en un cajón de la memoria. Para otros el iPod es un dispositivo útil que simplemente permite escuchar música con una experiencia similar a la del iPhone. Seguro que el iPod conserva muchos admiradores, pero durante los últimos años Apple no ha tratado demasiado bien al dispositivo. De hecho en ocasiones parecía que se había olvidado de él. La última vez que le prestó atención fue en 2019 con la presentación de la séptima generación de iPod Touch.
Este último iPod Touch está equipado con el A10 Fusion, el mismo chip que el iPhone 7 que Apple ya tiene más que amortizado. Sin embargo, se trata de un procesador que a un reproductor de música como al iPod Touch le sobra y le basta para cumplir con su función principal y además ejecutar otras aplicaciones como FaceTime vía wifi. Más discutible es el diseño, ya que difícilmente podremos encontrar un dispositivo que se venda desde 239 euros con unos marcos tan generosos como el iPod Touch de séptima generación.
“El legado del iPod sigue estando muy presente”, dice Greg Joswiak, vicepresidente sénior de marketing mundial de Apple. “Hemos integrado esta fantástica experiencia musical en todos nuestros productos, desde el iPhone hasta el Apple Watch, pasando por el HomePod mini, el Mac, el iPad y el Apple TV”. Para mucha gente llevar un iPod en el bolsillo es una molestia teniendo un smartphone que hace la misma función, pero el iPod es algo más que un dispositivo, es un símbolo de una época, igual que Napster.
