En España, los anuncios sobre la piratería siempre han estado rodeados de polémica, por sus imprecisiones y por criminalizar comportamientos no delictivos o incluso legales. En otros países, más aficionados a las telenovelas, prefieren atacar por otra vía:
Aunque lo parezca no se trata de una parodia, son anuncios reales que llevan tiempo emitiéndose en México. Y como no podía ser de otro modo, ya cuentan con su
contrarréplica.