Fils-Aime: "Creemos que nuestras oportunidades son muy buenas. El software impulsa al hardware en este negocio. Lo vemos una y otra vez. Lo vimos con la Wii y con la DS. Y lo estamos viendo ahora mismo con la 3DS. Hace un año quizá, estaba teniendo reuniones parecidas a las de ahora, cuando el desafío era, 'Reggie, ¿Qué vamos a hacer con el negocio de las portátiles? ¿Cómo lo expandimos?' Pues bien, sacamos a nuestras grandes franquicias a relucir, y vemos que pasa. […] Creemos que lo mismo ocurrirá con Wii U".
El ejecutivo señala que los servicios de televisión de Wii U son un valor añadido a la consola, pese a que su punto fuerte son los juegos. Fils-Aime aclara sin embargo que el marketing de Nintendo Wii U no seguirá la proposición de "lo hago todo", a diferencia de sus competidores: "En primer lugar quiero ser claro en que debemos atraer a la gente a nuestra proposición con las franquicias y el software que tenemos. […] Una vez que tengan el sistema, o estén interesados en el sistema, les ayudaremos a entender los beneficios de Nintendo TV como un argumento complementario".
Según Fils-Aime, Wii U está ganando inercia en el boca a boca a través de redes sociales y ya ha superado el inconveniente inicial de que algunos usuarios no entendían que la máquina era una nueva consola. Al mismo tiempo, califica de "estelar" la ecuación de valores de Wii U, compuesta principalmente por un precio muy reducido, gran variedad de packs y una diversa oferta de servicios gratuitos.
Por último, en respuesta a la pregunta sobre la relación de Nintendo con los desarrolladores, Fils-Aime asegura que el secreto está en generar una gran base instalada, al igual que con 3DS. "Al final, lo que quieren los desarrolladores es un ecosistema saludable en el que crear contenido y lanzar cosas. […] Y son franquicias clave como Super Mario 3D World, o como The Legend of Zelda: The Wind Waker las que nos van a ayudar a conseguirlo durante la época de Navidad".
