Siguiendo el hilo de los detalles desglosados hace un par de meses, Google ha señalado que Android O se centrará en la parte más vital del sistema operativo. Esto implica un renovado énfasis en las prestaciones, que aparentemente se traducirá en un arranque el doble de rápido y la ejecución de aplicaciones a una mayor velocidad gracias a la introducción de cambios significativos en el núcleo de Android.
El consumo de la batería es otro punto a tener en cuenta. Según Google, Android establecerá una serie de límites en la actividad permitida a las aplicaciones que se estén ejecutando de fondo, evitando así el consumo innecesario de recursos. Técnicamente esto ya era conocido, como también que Android O hará énfasis en el control de las notificaciones. Sin embargo, no teníamos constancia de las nuevas notificaciones emergentes desde los propios iconos, que podrán ser descartadas entrando a la app o desde el menú superior. Esta característica se añadirá a otras como el nuevo modo PIP (picture in picture).
Con todo, Android O no aspira a ser la versión definitiva para los teléfonos más básicos. Este mercado concreto será abordado por una iniciativa llamada Android Go, que ofrecerá una versión más limitada del sistema operativo con aplicaciones adaptadas de Google (YouTube Go, Chrome y Gboard entre ellas) para consumir menos memoria del sistema y de almacenamiento. Su lanzamiento tendrá lugar en 2018 y aparentemente permitirá disfrutar de los fundamentos de Android en dispositivos con 1 GB de RAM o incluso menos.
Android O estará disponible con carácter público y definitivo en el tercer trimestre de este año, pero la versión beta ya ha sido lanzada. Nada se sabe acerca de la disponibilidad en los dispositivos ya comercializados, pero Google afirma que uno de los puntos claves de esta revisión es la introducción de una nueva arquitectura modular que debería simplificar el proceso de actualización de cara a fabricantes y operadores.
Reconocimiento de imágenes avanzado y mejoras en seguridad
A pesar de la profundidad de los cambios introducidos en Android O, esta no será una actualización particularmente vistosa en sus novedades. Pero esto no quiere decir que Google haya descuidado sus aplicaciones y servicios.
En este sentido la compañía ha anunciado Play Protect, una iniciativa con la que quiere mostrar a los usuarios cuando fue la última vez que sus aplicaciones descargadas desde Google Play fueron revisadas en busca de malware, al tiempo que detecta aquellas problemáticas e incluso procede a desinstalarlas para evitar disgustos. Google Play Protect también incorporará el localizador de dispositivos extraviados para encontrar, hacer sonar, bloquear o eliminar los datos de cualquier tableta o teléfono desaparecidos.
Google Fotos es otra de las aplicaciones que experimentará un mayor cambio gracias a los últimos avances en inteligencia artificial. La nueva aplicación será capaz de sugerirnos actualmente qué imágenes son las mejores para compartir y generar álbumes para su revelado en forma libros físicos agrupando imágenes por localización, rostros y calidad, eliminando las más borrosas y los duplicados. Una vez listos, podrán encargarse a un precio de 10 dólares en Estados Unidos por el libro de tapas blandas o de 20 dólares con tapas duras.
Por otro lado tenemos una nueva tecnología llamada Google Lens. Este nuevo servicio de realidad aumentada se integrará en Google Fotos y el asistente virtual de Google para proporcionar información detallada sobre los objetos capturados por la cámara del dispositivo. Sus posibilidades son múltiples, desde identificar plantas a traducir textos, pasando por añadir citas a nuestro calendario a partir de una fotografía o incluso introducir la clave del Wi-Fi con tomar una foto de la contraseña en la pegatina de un router.
Pensando a medio plazo, Google sigue profundizando en sus tecnologías de inteligencia artificial, aprendizaje profundo y reconocimiento de imágenes. La compañía ha creado su propio hardware específico con este propósito, y avanza posibilidades a corto plazo como la eliminación automatizada de objetos incómodos en fotografías tomadas por el usuario.
Por el momento Google no ha querido facilitar una fecha para el lanzamiento de esta prestación todavía en fase de desarrollo y que podría dar mucho juego en el futuro.