NEC ha presentado la supercomputadora más rápida del mundo, desarrollada para el gobierno japonés, que se ha gastado más de 350 millones de dólares. La función del "Simulador Terrestre", (así es como ha sido bautizada la máquina) es predecir cambios climáticos o terremotos, con especial énfasis en la recreación anticipada de tifones. El "juguetito" ocupa una superficie equivalente a cuatro pistas de tenis y es capaz de procesar 35.600 Gigaflops.
Este superordenador rompe la hegemonía Norteamericana en el campo, que hasta hace poco tenía por Rey al ASCI White Pacific, con una potencia de 7.226 Gigaflops, lo que ha hecho apuntar a algunos un golpe tecnológico similar al que produjo la antigua URSS adelantándose a los EEUU durante carrera espacial con el lanzamiento del Sputnik. Actualmente los laboratorios nucleares y climatológicos de los Estados Unidos tienen desarrollos aun más potentes, pero todavía no son operativos.
Gracias a M3D por el aviso.