La Smach Z es el resultado de un proyecto que nos ha intrigado con su apuesta por integrar componentes básicos de PC (concretamente una eficiente solución SoC de AMD) a través de la plataforma modular Clickarm para cumplir la promesa de ejecutar correctamente cualquier juego AAA en un formato poco mayor que el de una consola portátil. Adaptándose a las especificaciones de las Steam Machines, Smach Z nos daría acceso a los juegos de que dispongamos en el catálogo de Steam, inicialmente limitándose a los compatibles con GNU/Linux pero a través de un objetivo adicional proporcionando también soporte para los de Windows.
Con la nueva información podemos ver que los responsables han afinado la especificación base decantándose por un AMD Merlin Falcon RX-421BD, que integra en un mismo chip una CPU de cuatro núcleos a 2.1Ghz y una GPU de la familia Radeon R7 a 800Mhz. La memoria RAM en el modelo base sería de 4GB y para almacenamiento dispondría de 64GB internos y una ranura MicroSD. Con el reducido consumo del SoC y el de los otros componentes relevantes como una pantalla de 6 pulgadas y resolución 720p (1080p en caso de alcanzar un objetivo adicional de la campaña) el dispositivo debería de alcanzar unas cinco horas de juego aunque el equipo también plantea el uso de una batería adicional externa para mejorar esa cifra.
La página de la campaña contiene diverso material gráfico correspondiente tanto al factor de forma planeado para el producto final como a los prototipos que hasta ahora han recorrido eventos como la Gamescom. Todos ellos tienen en común un control basado en la disposición de cuatro botones y cuatro gatillos, dos controles adicionales en la parte posterior, los dos paneles hápticos propios del Steam Controller y un stick analógico a la izquierda. Como accesorio pensado sobre todo para los emuladores, el equipo de Smach Z también está trabajando en los llamados "Z-Pads", un periférico que se encaja en los touchpads con la intención de simular los controles tradicionales.
Demostración de algunos títulos como Metro: Last Light, Skyrim o Just Cause 2 en un prototipo
El dispositivo, que está disponible en la campaña en una configuración base por 299€ y en otra con el doble de RAM, almacenamiento y la presencia de una cámara frontal y conectividad 4G añadida a la WiFi por 499€, podría ser compatible con Windows 10 en caso de alcanzar los 350.000€ de financiación. El texto de la campaña justifica la ambiciosa promesa de "suficiente potencia para jugar a cualquier juego AAA" con una serie de resultados de pruebas que incluyen títulos correspondientes al paso entre la generación pasada y la actual como Alien Isolation o Metro: Last Light Redux y el ejemplo más reciente de Overwatch.
La campaña del dispositivo creado por el equipo mallorquín parece destinada a lograr sus objetivos rápidamente, y tras la exhibición del prototipo en varios eventos su credibilidad se ha visto reforzada. Como principales incógnitas respecto a sus posibilidades de éxito quedan tal vez las correspondientes a la autonomía y la gestión de la refrigeración, para la que plantean una solución basada en espuma de cobre, el apropiado rendimiento en títulos más exigentes que los demostrados y el cumplimiento de un plan de producción que debería de poner el producto en manos de los primeros compradores en abril del próximo año.
