Durante un panel en el DICE Summit 2015 el presidente de Sony Computer Entertainment Worldwide Studios, Shuhei Yoshida, compartió su opinión sobre las franquicias que cada año llegan con una nueva versión a las estanterías de las tiendas. Su criterio parece alinearse con el de muchos jugadores, pues declaró su “odio” hacia la entrega anualizada de algunas sagas.
Explica Yoshida que en los primeros días de PlayStation las secuelas a menudo se veían como un desperdicio, algo que rara vez devolvía un retorno tan elevado como el original. Por ese motivo los equipos de márquetin y ventas (cuyo fin es el lucro) no querían arriesgarse, permitiendo a los desarrolladores dar vida a nuevas ideas.
Pero llegó el día en que los equipos de mercadotecnia vieron cómo podrían beneficiarse de las secuelas y de sacar una año tras año, en ese momento empezaron a presionar. Alinear las expectativas de ventas con la de los desarrolladores se convirtió en algo difícil y la tensión creció más cuando se ampliaron los ciclos de desarrollo.
Los ejecutivos de marketing, dice Yoshida, no entienden el proceso de desarrollo, así que tienden a hacer comparaciones con franquicias como Call of Duty y Assassin’s Creed. Ambas cuentan con una entrega cada año y obtienen beneficio. Pero no siempre funciona así, motivo por el cual Yoshida “odia” las sagas anuales.
Los equipos que componen SCE Worldwide Studios han dado vida a muchas franquicias, pero salvo raras excepciones siempre han ofrecido entregas con más de un año diferencia. Por ejemplo, los tres primeros juegos de la exitosa saga Uncharted llegaron todos con dos años de diferencia entre ellos.
