Jeff Vogel de Spiderweb Software ha publicado en su blog personal un artículo asegurando que la "burbuja" de los juegos independientes está a punto de explotar debido a que hay "demasiados juegos". Vogel y su compañía fundada en 1994 llevan publicando títulos de forma independiente desde su nacimiento, siendo responsables de las sagas de rol Exile, Nethergate y Geneforge.
El desarrollador sitúa el boom de los indies en 2008 con el lanzamiento sucesivo de títulos como Braid, World of Goo, Castle Crashers o Minecraft entre otros. A partir de ahí, Vogel considera que "demasiados" desarrolladores se sumaron a la realización de pequeños proyectos con altos márgenes de beneficio e independientes de las grandes compañías.
"El auge de los juegos indie durante los últimos años ha sido fantástico. Ha dado lugar a muchas compañías buenas y con gran base económica que tienen la oportunidad de ofrecer grandes productos", escribe Vogel. "Pero muchas otras compañías están intentando entrar en este espacio, y no estoy seguro de cuántos de ellos son conscientes de que las cosas están cambiando rápidamente".
Como prueba, Vogel menciona el hecho de que se han publicado más juegos en Steam durante los cinco primeros meses de 2014 que durante el año entero de 2013, "¿cuántas veces vimos durante el año pasado el artículo de, '¡Otros 100 juegos aceptados en Greenlight para su publicación!'?". Del mismo modo Vogel se refiere al casi 40% de juegos de Steam que no se ejecutan ni una sola vez.
"Los indies ahora consiguen una gran parte de su negocio a través de ofertas y packs, dándose de codazos para tener la oportunidad de vender su juego por un dólar menos. […] Los juegos independientes comenzaron como juegos escritos con pasión por la gente que los amaba. Ahora todo se centra en sacar un montón de productos decentes pero indiferenciados que se ofrecen por unos pocos céntimos a gente que tampoco les importan una mierda. Esto no es sostenible".
El desarrollador sitúa el boom de los indies en 2008 con el lanzamiento sucesivo de títulos como Braid, World of Goo, Castle Crashers o Minecraft entre otros. A partir de ahí, Vogel considera que "demasiados" desarrolladores se sumaron a la realización de pequeños proyectos con altos márgenes de beneficio e independientes de las grandes compañías.
"El auge de los juegos indie durante los últimos años ha sido fantástico. Ha dado lugar a muchas compañías buenas y con gran base económica que tienen la oportunidad de ofrecer grandes productos", escribe Vogel. "Pero muchas otras compañías están intentando entrar en este espacio, y no estoy seguro de cuántos de ellos son conscientes de que las cosas están cambiando rápidamente".
Como prueba, Vogel menciona el hecho de que se han publicado más juegos en Steam durante los cinco primeros meses de 2014 que durante el año entero de 2013, "¿cuántas veces vimos durante el año pasado el artículo de, '¡Otros 100 juegos aceptados en Greenlight para su publicación!'?". Del mismo modo Vogel se refiere al casi 40% de juegos de Steam que no se ejecutan ni una sola vez.
"Los indies ahora consiguen una gran parte de su negocio a través de ofertas y packs, dándose de codazos para tener la oportunidad de vender su juego por un dólar menos. […] Los juegos independientes comenzaron como juegos escritos con pasión por la gente que los amaba. Ahora todo se centra en sacar un montón de productos decentes pero indiferenciados que se ofrecen por unos pocos céntimos a gente que tampoco les importan una mierda. Esto no es sostenible".
"La crisis del videojuego de 1983, también conocida como la debacle de Atari, fue el desafortunado evento que dio fin a lo que se considera la segunda generación de los videojuegos. La crisis comienza el 21 de junio de 1982, llevando a la quiebra a varias empresas norteamericanas dedicadas a la producción de ordenadores y videojuegos. Seguramente el principal detonante de la crisis fue la enorme cantidad de videojuegos de baja calidad existentes en el mercado de la época, llegando éstos a ocasionar una notable reducción en las ventas de videojuegos y una enorme pérdida de la confianza en los clientes. La crisis duró aproximadamente dos años, llegando incluso a sembrar numerosas dudas sobre la viabilidad a largo plazo de la industria del videojuego"
El mundo es un pañuelo.
Y no, no porque sea un juego indie, es un juego bueno, la mayoria SON BASURAS, incluyendo muchos juegos "aclamados". Y eso que me gustan los juegos indies.
En el caso de Steam, el modelo Steam no esta funcionando, Steam espera que los diseñadores hagan juegos y que los vendan a precio de nada, y mas encima compitiendo contra otros 100!.
Si estoy de acuerdo en que hay demasiados juegos. Demasiados "plataformas retro", demasiados juegos iguales a bajo coste. Pero lo que va a ir pasando es lo que tiene que pasar: que cada vez habrá menos pastel para todos y sólo serán rentable los juegos que destaquen por encima del resto, como tiene que ser. Cuando la gente vea que ya no es tan rentable hacer juegos indie, dejarán de producirse en tanta cantidad. Ley de oferta y demanda de toda la vida y aquí no ha pasado nada.
Si se siguen desarrollando es porque sigue habiendo demanda.
Aún así, siempre hay gente con ganas de aprender, y una forma de hacerlo es programando esos juegos de bajo coste y alta adicción, la burbuja puede reventar en 1000 pedazos que le dará igual.
En el futuro pueden ocurrir cosas como que las empresas grandes hagan campaña para desprestigiar los juegos indies (como ya hicieron los gigantes de Hollywood con el cine independiente) o que se clasifique de una forma distinta a los juegos indie y los otros. Pero no vivimos en ese futuro aún.