De esta manera los mensajes que se envíen a través de WhatsApp estarán haciendo uso del protocolo TextSecure, lo que proporciona el cifrado conocido como "extremo a extremo". De momento este tipo de cifrado sólo se produce en las versiones Android de la aplicación y para mensajes individuales entre usuarios, no para los grupos ni para los contenidos multimedia (fotos, vídeos, etc.), aunque aseguran estar trabajando para conseguir implementarlo tanto en chats de grupo como en otros sistemas operativos móviles.
El cifrado "end-to-end" que se ha incorporado por defecto con la última actualización de WhatsApp en Android establece un código de cifrado que solamente puede ser decodificado por las personas que mantienen la conversación. Es importante señalar que este método ya se utiliza en otras aplicaciones de mensajería como Telegram o las menos conocidas Cryptocat y Silent Text.
Según Whispersystems el trabajo dedicado para desarrollar el protocolo de seguridad en WhatsApp ha sido de seis meses, aunque aún les queda un largo recorrido para conseguir establecer por defecto su cifrado en todas las plataformas. "Creemos que este logro ya representa el mayor despliegue de la comunicación cifrada extremo a extremo de la historia", han explicado.
Tal y como publican en The Verge, al contrario de lo que ocurre con Facebook Messenger o Google Hangouts con el nuevo cifrado de WhatsApp los propios servidores de la compañía no pueden ver los mensajes que se intercambian los usuarios, incluso aunque un tribunal solicitara mediante orden judicial el descifrado del código no será posible ofrecerlo.
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