En su carta a los accionistas, Netflix reconoce que el ritmo de crecimiento depende en parte de factores que no controla, incluyendo el número de televisores conectados y el coste de los datos. Pero hay otros elementos como las cuentas compartidas que sí puede gestionar. La compañía dice que además de 222 millones de clientes que pagan la suscripción mensual, ha calculado que hay más de 100 millones de hogares adicionales que disfrutan del servicio mediante una cuenta compartida. De todos ellos, 30 millones son de Estados Unidos y Canadá.
Netflix afirma que el porcentaje de uso de cuentas compartidas no ha cambiado mucho a lo largo de los años, pero asegura que si esta práctica se une a los factores que no puede controlar, el resultado es que es más difícil que las suscripciones aumenten en muchos mercados. La compañía reconoce que este problema quedó oculto por el gran crecimiento a causa de la COVID, pero ahora que la pandemia se va quedando atrás comprueba que crecer en número de clientes le está costando mucho, algo que le pasa factura en bolsa.
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Hace unos años Netflix no tenía problemas con las cuentas compartidas e incluso las usaba como un reclamo, pero ahora que la competencia aprieta y le cuesta sumar parroquianos ha puesto en marcha iniciativas para monetizar esta práctica. La más reciente es una prueba que se desarrollará en Chile, Costa Rica y Perú y que consistirá en ofrecer la opción de compartir la cuenta con gente que no vive en el mismo hogar a cambio de pagar un extra mensual. Los precios varían según el país, pero al cambio hablamos de unos 2 o 3 euros más al mes.
Respecto al número de suscriptores, a lo largo de los últimos tres meses Netflix ha perdido 200.000 clientes en todo el mundo. Durante este periodo la compañía ha abandonado Rusia donde tenía 700.000 usuarios, y si no fuera por este movimiento motivado por las sanciones y la guerra en Ucrania, habría ganado 500.000 miembros. La situación es especialmente difícil en Estados Unidos y Canadá, donde el servicio en streaming ha visto desaparecer 600.000 suscriptores en gran parte debido al aumento del precio de la suscripción mensual.
Netflix no espera que la situación mejore a corto plazo y para el próximo trimestre calcula que podría perder hasta 2 millones de clientes.
