Los Ryzen 4000 para ordenadores de sobremesa son unos procesadores un tanto peculiares, puesto que no se ofrecerán al gran público con su cajita de cartón y su disipador como era de imaginar. En su lugar, AMD los lanzará al menos inicialmente como un producto para fabricantes OEM, con Dell, HP y Lenovo entre las primeras marcas colaboradoras.
Sea como fuere, los Ryzen 4000 llegan inicialmente en seis versiones distintas con sus correspondientes versión PRO, estas últimas con funciones de administración y seguridad para empresas. La gama parte en el Ryzen 3 4300 GE, con cuatro núcleos y ocho hilos de procesamiento en un perfil térmico de 35 vatios, para tocar techo en un potente Ryzen 7 4700G con configuración 8/16 y un TDP de 65 vatios. Las versiones GE ofrecen un consumo más ajustado a costa de reducir la velocidad de reloj.
Todos estos chips son APU, y cuentan por tanto con sus propios gráficos integrados Radeon. Sus características son a priori interesantes. El Ryzen 3 más económico ya tiene seis compute units a 1.700 Hz, mientras que el mencionado Ryzen 3 4300 GE lleva sus ocho compute units hasta los 2.100 MHz, imprimiendo a la gama prestaciones gaming más allá de los indies y los juegos antiguos (lamentablemente AMD no ha facilitado cifras de FPS).
Según ha señalado la compañía, próximamente la familia Ryzen recibirá una nueva línea de APU de sobremesa basadas en Zen 2 para montadores y consumidores (Zen 3 se lanzará a finales de 2020, pero seguramente solo para equipos profesionales), sin que por ahora no hay más detalles al respecto. En cuanto a los Ryzen 4000 anunciados hoy, los primeros equipos de consumo llegarán a lo largo del tercer trimestre.