La crisis de los semiconductores está poniendo en graves apuros a industrias de lo más diverso, desde el mundo del videojuego a la producción de automóviles. No hay suficientes chips ni otros tipos de componentes electrónicos para satisfacer la demanda del mercado debido a la tormenta perfecta creada por la pandemia y la sobreocupación de las líneas de producción para dar cabida a dispositivos de gran volumen de ventas, y aunque esta circunstancia podría interpretarse como un maná caído del cielo para firmas como Samsung, la realidad es muy distinta.
Según ha comunicado el co-CEO del grupo surcoreano a sus accionistas, el "grave desequilibrio" de la industria de los semiconductores podría afectar negativamente a sus propios negocios. El temor de Koh Dong-jin es que los graves efectos que la crisis está teniendo entre los fabricantes de coches, con firmas como Continental e Innolux agonizando para fabricar sistemas electrónicos con chips relativamente sofisticados, se extiendan a otras industrias.
Ahora mismo hay numerosas cadenas de producción de automóviles paradas sine die o con turnos que se van cancelando en base a unos suministros que en ocasiones llegan por vuelos chárter. En algún momento fabricantes como Samsung y TSMC se volcarán para satisfacer esa demanda desatendida, y entonces habrá que ver qué sucede con otros componentes electrónicos. Samsung, por ejemplo, es un auténtico titán de la industria, pero pese a ello sus teléfonos, televisores y electrodomésticos utilizan chips fabricados por terceras compañías. Y por ahí podrían llegar los problemas.
Según MS Hwang, analista de Samsung Securities, la división de gestión de inversiones del grupo, los problemas de suministro de procesadores de aplicaciones de Qualcomm fabricados por TSMC está afectando a todo el mundo menos a Apple (que por su enorme volumen de ventas tiene blindada su producción), próximamente la situación podría extenderse al mercado informático por la falta de componentes para pantallas, lo que podría elevar el precio de los monitores.
Samsung valora no lanzar un nuevo Galaxy Note en 2021
Por otro lado, Samsung podría cancelar el lanzamiento de un Galaxy Note para este año. En su caso el problema no sería la falta de componentes electrónicos (aunque dada la gravedad de la situación cabe suponer que podría afectar a su disponibilidad comercial a medio plazo), sino al hecho de que tener dos buques insignia en la misma gama y renovados con frecuencia anual no es algo del todo deseable.
Con todo, Samsung no parece dispuesta a cancelar la gama de forma definitiva. A pesar de que el Galaxy S21 arqueó numerosas cejas al introducir compatibilidad con el lápiz S Pen, sus prestaciones son inferiores. El fabricante mantiene que su teléfono más productivo sigue despertando un interés lo suficientemente importante como para mantenerlo, y por ello señala que trabaja para lanzar un modelo de nueva generación en 2022.
Según ha comunicado el co-CEO del grupo surcoreano a sus accionistas, el "grave desequilibrio" de la industria de los semiconductores podría afectar negativamente a sus propios negocios. El temor de Koh Dong-jin es que los graves efectos que la crisis está teniendo entre los fabricantes de coches, con firmas como Continental e Innolux agonizando para fabricar sistemas electrónicos con chips relativamente sofisticados, se extiendan a otras industrias.
Ahora mismo hay numerosas cadenas de producción de automóviles paradas sine die o con turnos que se van cancelando en base a unos suministros que en ocasiones llegan por vuelos chárter. En algún momento fabricantes como Samsung y TSMC se volcarán para satisfacer esa demanda desatendida, y entonces habrá que ver qué sucede con otros componentes electrónicos. Samsung, por ejemplo, es un auténtico titán de la industria, pero pese a ello sus teléfonos, televisores y electrodomésticos utilizan chips fabricados por terceras compañías. Y por ahí podrían llegar los problemas.
Según MS Hwang, analista de Samsung Securities, la división de gestión de inversiones del grupo, los problemas de suministro de procesadores de aplicaciones de Qualcomm fabricados por TSMC está afectando a todo el mundo menos a Apple (que por su enorme volumen de ventas tiene blindada su producción), próximamente la situación podría extenderse al mercado informático por la falta de componentes para pantallas, lo que podría elevar el precio de los monitores.
Samsung valora no lanzar un nuevo Galaxy Note en 2021
Por otro lado, Samsung podría cancelar el lanzamiento de un Galaxy Note para este año. En su caso el problema no sería la falta de componentes electrónicos (aunque dada la gravedad de la situación cabe suponer que podría afectar a su disponibilidad comercial a medio plazo), sino al hecho de que tener dos buques insignia en la misma gama y renovados con frecuencia anual no es algo del todo deseable.
Con todo, Samsung no parece dispuesta a cancelar la gama de forma definitiva. A pesar de que el Galaxy S21 arqueó numerosas cejas al introducir compatibilidad con el lápiz S Pen, sus prestaciones son inferiores. El fabricante mantiene que su teléfono más productivo sigue despertando un interés lo suficientemente importante como para mantenerlo, y por ello señala que trabaja para lanzar un modelo de nueva generación en 2022.
Aunque ellos fabrican mucho.
Están atadados a contratos con otras compañias y no pueden simplemente dejarlo tirados y puede que ni siquiera ellos puedan fabrircar para si mismos.
La verdad que lo de los semiconductores algo bastante curioso y creo que todo va enfocado a la falta de elementos como el coltán y que el covid-19 ha agravado.
Del coltán se extráe el tantalio, elemento empleado para fabricar los condensadores electrolíticos que llevan su nombre, cuyas propiedades permite tener condensadores de un tamaño bastante reducido y con unas capacidades mejores en cuanto a conductividad (ESR)
Aquí hablan de que el cuello de botella está en la fabricación de los semiconductores, no tiene nada que ver el coltán aquí. Esto depende de que solo 4 empresas a nivel mundial fabrican semiconductores "tope de gama", y la demanda ha superado a la oferta, habiendo habido retrasos durante la pandemia, que ahora se están haciendo notar...
Europa debería apostar fuerte y montar una fundición de silicio puntera a toda costa para evitar la dependencia de paises terceros y desarollar una nueva industria que hace mucho que dejo de ser puntera en este continente...
Es innecesario el Note teniendo el S21 ULTRA
Amén. Eso y legislar contra la obsolescencia programada y obligar a las empresas a dar recambios por un periodo de 10-15 años.
Hay gente que renueva móvil cada 5 o 6 meses. Yo es algo que no puedo entender, pero que cada cual haga con su dinero lo que quiera, aunque luego están las consecuencias de desabastecimiento.
Y por cierto, aunque en teoria se le echa la culpa al coronavirus, la realidad es que mas culpa tiene el veto de Trump a los chinos, ya que estos con lo del cierre de la fabricacion de procesadores de Huawei a TSMC ha echo que los chinos monten sus plantas propias y las llenen de personal que viene precisamente de Samsung y TSMC, lo que hace que estas fundiciones se vean obligadas a formar personal y que se les aumente la tasa de fallos al tener menos personal con tanta experiencia.
Me lo dieron en la empresa y cada dia me planteo más volver a mi antiguo Note 8.