De funcionamiento totalmente autónomo, este visor de dimensiones bastante contenidas presenta una ficha técnica bastante notable, por más que todavía sea un diseño conceptual sin visos de llegar a las estanterías. Su corazón no es otro que el chipset Snapdragon XR2 Gen 1, el mismo hardware que podemos encontrar en las Quest Pro de Meta, y utiliza dos pantallas micro OLED de resolución desconocida, una para cada ojo. Aunque no las estaremos mirando directamente.
Tratándose de un dispositivo de realidad aumentada, las Xiaomi Wireless AR Glass Discovery Edition deben superponer imagen sintética (generada por el dispositivo, como mensajes de texto, direcciones de mapas, traducciones etc.) sobre el mundo real, por lo que el contenido de sus pantallas micro OLED, con un brillo máximo de 1.200 nits, se proyecta usando unos prismas especiales sobre unas lentes exteriores electrocrómicas. Esta tecnología permite modificar la opacidad del cristal mediante una pequeña corriente eléctrica, de modo que se oscurecen cuando el usuario precisa prestar una mayor atención a la información generada por las gafas.
Más allá de la tecnología de imagen, las Xiaomi Wireless AR Glass Discovery Edition destacan por su ligereza y facilidad de uso. Parcialmente construidas en magnesio-litio y fibra de carbono, apenas pesan 126 gramos, a pesar de lo cual integran dos cámaras para la captura de información exterior y el reconocimiento de gestos, así como una batería de diseño propio. Lamentablemente Xiaomi no ha facilitado la autonomía del dispositivo, que posee un funcionamiento totalmente autónomo.
Xiaomi no ha comunicado un precio ni una fecha de lanzamiento, aunque a priori parece un dispositivo bastante próximo a lo que sería un producto comercial. De hecho, la compañía señala que funciona conectándose a un Xiaomi 13 "u otros dispositivos compatibles con Snapdragon Spaces", lo que puede dar a entender que se trata de algo más que un simple prototipo de demostración.