Sumioni
Para consultas y debates sobre el contenido de este artículo, visita el Hilo oficial.
Sumioni: Demon Arts
Contenido |
Historia
Vivía una vez un gran ministro llamado Michisada, querido y respetado por todo el mundo que le servía. Todos, excepto Seimei - un hombre que deseaba mucho el sitio de Michisada, estaba dispuesto a entregar su alma para conseguirlo. Llamando a las fuerzas del infierno por si mismo, Seimei se hizo con el control del gobierno japonés, manteniendo a Michisada y su hija prisioneros de su más leal asistente, Tengan.
Mientras Japón derivaba más y más hacia el caos y la desesperación, Tengan sabía que algo tenía que hacer. Recordó una legenda de un viejo santuario, donde un demonio de tinta había sido sellado tiempo atrás.
Era la última esperanza para la supervivencia de Japón. Tengan tenía que sacrificarse para despertar a Agura de su largo letargo, así que, él confió en los antiguos compañeros del dios de tinta, Yomihi y Shidou, para vigilar el ritual.
El destino de Japón, y quizás de todo el mundo, había sido encargado a un reacio y apático demonio de tinta.
Deidades de tinta
El Sumioni - Agura
El Sumioni, o demonio de tinta, Agura es capaz de representar varios fenómenos gracias a su maestría del poder del "sumi", o tinta. Sin embargo, la falta de motivación de Agura y su general indiferencia por otros le causaron que lo sellaran cientos de años atrás. Pero como se dice, en momentos desesperados medidas desesperadas, así que a Agura se le concedió una libertad limitada gracias al maestro de la tinta Tengan, con la condición de usar sus poderes para salvar a Japón.
La Diosa de tinta de los cielos - Yomihi
Una preciosa diosa fénix, Yomihi tiene tendencia a no tomarse las cosas en serio. A menudo pasa el tiempo con sus dos compañeros y nunca para de sonreir, no importa cuál adversas sean las circunstacias.
El Dios de tinta de la tierra - Shidou
Shidou posee un gran contraste comparado con sus aliados, posee un fuerza y una lealtad incuestionable a Tengan. Siempre serio y analizador, Shidou era precavido de las cualidades de sus aliados al principio, pero sus dudas iniciales se borraron rápidamente después de ver de lo que eran capaces Agura y Yomihi.
Juego
Dibuja tu propio camino
Usa tu dedo para crear caminos de tinta en la pantalla táctil, con los que Agura puede usar. Es útil para atacar a enemigos de gran tamaño o enemigos aéreos, obtener objetos difíciles de alcanzar o evitar obstáculos. La fuerza de Agura también incrementa mientras esté encima de uno de estos caminos de tinta.
Uso de magia
Presiona el botón L para entrar en el Modo Dibujo, en este modo, podrás crear líneas en la pantalla táctil. Presiona por segunda vez el botón L para salir de este modo, y estas líneas se convertirán en un fuego abrasador que eliminará a los enemigos.
Invoca a los dioses de tinta
Poderosas criaturas conocidas como "Dioses de tinta" pueden ser invocados trazando un dibujo en la pantalla. Entra en el Modo Dibujo, pulsa el icono de Yomihi o de Shidou, y entonces traza el dibujo que aparezca en pantalla. Si la ejecución fue correcta, un dios de la tinta aparecerá para echarte una mano. Estas invocaciones requieren de tinta, por lo que evita fallar al usarlas.
Rellena tu medidor de tinta
La tinta es necesaria para desatar las artes demoníacas de Agura, pero esta se irá acabando. Aunque se rellene automaticamente, este proceso será lento, por lo que podemos hacerlo manualmente, agitando el dedo en el panel táctil trasero. Sin embargo, esto solo puede hacerse cuando Agura esté sin moverse.
Ramas del camino
Por cada pantalla superada, el jugador será puntuado según cómo lo haya hecho. Dependiendo del resultado, numerosos caminos opcionales se irán abriendo en el camino.
Acciones especiales
Agura también tiene diferentes habilidades y maniobras para salir ileso de los combates.
Información general
- La edición USA saldrá únicamente en la Store por un módico precio de 19,99$.
Sumi-e
Sumi-e, literalmente "Pintura de tinta", es un antiguo arte que data de más de 200 años de antiguedad. Iniciandose en China, rápidamente se extendió en muchos paises asiáticos, incluido Japón. Quienes lo practicaban, a menudo usaban la naturaleza como tema; para ellos, no era copiar lo que veían, sino captar la esencia de lo que estaban viendo. Usando una pluma y un papel de arroz o seda, capturaban el alma de lo que tenían en frente de ellos.
La tinta llevaba mucho tiempo el crearla. Se empezaba quemando el hollín de las plantas; el cuál se templaba usando pegamento de piña o resina. Después, se raspaba con una losa curvada llamada piedra de tinta. Dependiendo de cuanta agua fuera añadida a la piedra de tinta, el espesor de la tinta cambiaba. Finalmente, con un pincel, hecho de pelo de diferentes animales y de un papel absorbente, el artista podía empezar con su trabajo.