Un grupo de 5 personas con 3 esbirros consiguen pasarse la mision del Sumo Sacerdote Alkar "por los pelos"
Esta noche, un grupo de elfos del bosque de la fragua han visto un espectáculo que nunca olvidaran: como dos valientes guerreros esbirros -llamados Devona i Thom- salvaban su mundo de la destrucción.
Los hechos empezaron cuando un grupo compuesto por 4 EOLianos (Melian, Lobo, Gomker y Pucka), un aliado (Jalan El Immortal), y 3 esbirros (Mhenlo, Devona y Pequeño Thom), entraron en el misterioso bosque de la fragua del pesar, capitaneados por el Sumo Sacerdote Alkar. Su misión, conseguir todos los cristales que ayudarían a dicho sacerdote completar el ritual que destruiría el mal junto con el templo. Todo iva muy bien cuando Melian, cumpliendo con su deber de proteger a Alkar, fue abducido por un misterioso fenómeno llamado "Menta". Su compañera de arco, la princesa Pucka, fue quien ocupó su preciado puesto mientras el resto del grupo se dedicaba a buscar todos los cristales, librando con honor cada batalla. En un intento desesperado de ayudar a sus compañeros en un momento crítico, Pucka dejó su puesto y por un momento puso en peligro la vida del sacerdote, rectificando a tiempo, aunque muriendo para poder resucitar junto con ellos. Otro estraño fenómeno, llamado "trabajo", hizo desaparecer a Gomker, sumando ya dos bajas. En su puesto, mientras los 5 valientes van a por los últimos cristales, Pucka iva frenando con su vida a los que intentaban robar la de Alkar, pidiendo ayuda a sus compañeros para conseguir su objetivo. La tarea se hacía cada vez más dificil, la moral era cada vez más baja... sólo faltaba un cristal, pero los enemigos ganaban en número. En un intento desesperado de salvar la situación, Jalan consiguió dejar el útlimo cristal en el templo, pero murió, junto con sus compañeros de batalla. Sólo quedaban Devona y Thom, que con la ayuda del sacerdote y a duras penas consiguieron eliminar a los que se oponían al ritual... finalmente, cuando todo parecía llegar a su temido e inevitable final, Alkar empezó su ritual mientras las vidas de los dos valientes esbirros se ivan apagando... y lo terminó? ... nadie podía creer lo que estaba viendo!!! el templo estaba cayendo!! que como fué eso? otra vez vivos? lo habían conseguido!! poco después, Alkar ya estaba dando la merecida recompensa a los heroes, mientras esos ivan tomando conciencia de lo que había pasado, no pudiendo evitar pensar en los que no habían podido disfrutar de ese magnífico final con un cierto regusto de tristeza. Uno de los comentarios que se oyeron de esa gloriosa batalla fue... "ha sido la batalla más por los pelos que he vista nunca"... o eso es lo que se recuerda....
EL FINAL DE LA HISTORIA:
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Un placer chicos! nos vemos!