A ver, el hilo no va de repartir carnets de liberales ni de si el aborto es comunista, liberal, católico o surrealista. Y como ya dije, se puede criticar, pero con argumentos, no con consignas y hombres de paja.
El problema de Argentina es que los políticos alargan más el brazo que la manga, mano que meten en todas partes desde hace como poco un siglo. Han probado todos los trucos del manual para seguir en el ajo a costa de su país, con lo cual nadie se fía de ellos, y aunque gane uno que quiera acabar la fiesta, que el siguiente que venga pueda deshacer lo andado llevándose por delante justo a los que confiaron no ayuda a recuperar la confianza.
Si Milei gana y fracasa en aplicar su plan, si provoca una hiperinflación, una quiebra, si deja a los pobres con una mano delante y otro detrás, si les roba a los argentinos sus ahorros, si declara una dictadura y empieza a tirar zurdos en medio del océano, invade las Malvinas, si se forra a base de contratos públicos y le condenan por ello… no será el primero que lo habrá hecho, será uno más. Así de bajo está el listón. No estamos en la situación de “si gana la persona incorrecta nos vamos a la mierda”, estamos en la situación de “si gana la persona incorrecta, seguimos en la mierda, como mucho nos hundimos algo más rápido”.