Hola
@shiniori, en primer lugar no sabes la alegría que me da leerte y en segundo lugar quiero antes de continuar mandarte un abrazo (pero de los fuertes) a ver si soy capaz de que te llegue.
Como sabes me enteré de tu problema directamente por ti y la verdad es que me afectó mucho. Entiendo que esto es algo totalmente normal para cualquier tipo de persona que tenga un mínimo apego por el resto de la humanidad, pero en mi caso particular creo que puedes entender que te tengo mucho aprecio y que si es duro que alguien tenga un problema cuando ni siquiera lo conoces y te puedas llegar a preocupar o empatizar con esa persona, cuando le pasa a alguien por el que tienes un sentimiento más fuerte esto se multiplica y exponencia al cariño que sientes por esa persona. En mi caso como te digo, fué mucho.
Como te comenté en su día, por desgracia he pasado este tipo de problemas con familiares y es duro, muy duro, pero no queda otra que mirar hacia delante cuando algo así se cruza en la vida y tener esperanza y fuerza suficiente para superarlo.
Por otro lado, yo personalmente entiendo que cada persona somos de una manera y reaccionamos a los problemas de una manera distinta, y por eso en su día te dije que tanto si necesitabas tranquilidad para poder ir asimilando esta nueva etapa, como si necesitabas desahogarte iba a ayudarte en todo lo que estuviera en mis manos. Decidí entonces no agobiarte y que fueran las cosas como tuvieran que ir dejándolo ir de tu mano (algo de lo que ahora mismo me arrepiento, después de haber descubierto este hilo) eso si, sabiendo que tenias a tu familia a tu lado para darte todo el apoyo y fuerzas necesarios en esos momentos de incertidumbre inicial de aquellos días pasados.
Es difícil saber como se puede tomar cada persona estas situaciones de tanto estress, nervios, dudas... ¿le molestarás al hablarle? ¿Le agobiará? ¿Necesita estar solo? ¿Se cansará de oír todos los días lo mismo?.... Como te dije Shiniori, estas cosas son muy duras para el que las sufre... pero tu sabes mucho mejor que yo que todo tu entorno no puede escapar tampoco de ese maldito sufrimiento. Y quiero que sepas, con el corazón en la mano, que durante todo este tiempo te he mandado mucha fuerza y has estado presente en mis pensamientos.
Dicho esto, hoy me ha dado un vuelco al corazón al ver tu avatar en un comentario de una noticia y ver que estabas por aquí, como siempre, charlando con los compis y siguiendo adelante con todo. Seguidamente he entrado a tu perfil y he visto este hilo y me he puesto al día de todo. Veo que de momento la cosa aunque parezca que va mucho mejor que cuando hablamos por última vez, todavía no está solucionada, no me queda claro si por incompetencia de la sanidad o por que estas cosas van así, pero veo que todavía no hay nada confirmado al 100% y que cabria incluso la posibilidad de aún habiéndolo pasado tan mal con todas las pruebas y operaciones pudiera resultar todo en un "susto" o algo no tan grave, de lo cual me he alegrado mucho.
Solo decirte Shiniori lo que te he dicho ya alguna vez más, para mi eres una persona maravillosa y no es justo que la vida trate de esta manera a gente como tu o como tantos otros que padecen este tipo de enfermedades. Esto no se lo merece nadie, pero la gente como tu menos todavía y no es justo.
Tengo muchas esperanzas en que todo va a salir bien, que el camino puede ser duro para llegar a la meta pero confió plenamente en tu fortaleza y en las ganas que le pones a la vida para que llegues ahí sin problema.
Espero poder llegar a conocerte en persona algún día y poder devolverte todo el cariño, el respeto, el saber estar, la buena voluntad, la dedicación, la paciencia, la generosidad, la fuerza y la ilusión que me has dado a mi desde que te conocí y que te definen tal y como eres, una persona muy grande con un corazón que no le cabe en el pecho.
Estas situaciones están hechas para los valientes y aquí mi apuesta es muy clara, a valiente a ti no te gana nadie y esta "pelea" la vas a ganar tu de calle.
Ánimo Shiniori, sigue adelante y no te desanimes sabes que somos muchos los que estamos contigo. Un fuertísimo abrazo maestro.