Entro con mi novia en el Game de Principe Pio (Madrid) a buscar juegos de Gamecube (agotados) mandos de Gamecube o Clásicos para Wii (agotados) y algun jueguecillo que mole.
Tras mirar un rato, nos decidimos por el Mario Party 8 (49,95) y ella dice que me lo regala, con lo cual se acerca a pagarlo al mostrador. La dicen que ya no les quedan precintados y que si lo queremos, tendrá que ser sin precinto. Ella (que no entiende mucho pero que tonta no es) me mira y yo respondo que no voy a pagar 50 euros por un juego sin precinto ni de coña. Damos las gracias y nos vamos.
El otro dependiente nos para y nos dice que me va a decir una cosa "de cultura general". Y con la misma, me suelta que "en el Reino Unido no se vende ningún videojuego con precinto".
Mi respuesta: "Ellos verán lo que hacen con su dinero, pero yo con el mío tengo cuidado".
Por supuesto, lo que tenía que haberle dicho es que en el Reino Unido aún miden en millas y que todo el mundo sabe que Europa empieza en los Pirineos. Pero lo cierto es que para ese tipo de cosas no tengo demasiada mala leche. Me cogen siempre por sorpresa.
Lo que yo me planteo es: ¿Es normal y aceptable la actitud de este dependiente? ¿Es motivo de cabreo que un listillo me venga a dar "lecciones de cultura general"? ¿Os han tratado de vender alguna vez juegos desprecintados al precio de los nuevos?
Nunca había tenido ningún desplante en un Game, pero la verdad es que este me ha dejado con muy mal sabor de boca. ¿Qué os parece a vosotros?