Confieso que hará casi un mes intenté hacer una locura de la cual no me siento para nada orgullosa. Ocurrió algo que hizo que perdiera la poca estabilidad que había conseguido y quise desaparecer. A mi manera incluso me despedí de mi familia y amigos. Estaba decidida.
Pero algo me hizo abrir los ojos y vi lo equivocada que estaba. Fue el día de mi santo y todo mi entorno se acordó de felicitarme e incluso vinieron a visitarme. Me imagine el daño que le haría a ellos si lo hubiera hecho y me sentí muy estúpida.
Además pensé que si ellos me querían tal y como soy tampoco sería tan mala y no me merezco que haya personas que me tratan mal. Y si lo hacen no es culpa mía o de mi condición, es culpa suya. Además me di cuenta que necesitaba superar algunas cosas del pasado para poder relacionarme con los demás con normalidad y replantearme muchas cosas.
Decidí tomarme unos días apartada del mundo y de los míos para vaciar "mi mochila emocional". Debería haberlo hecho mucho antes: me siento ligera, libre y fuerte.
Ya no soy una niña, no tengo que tener miedo de que me traten mal otra vez. En este momento no lo permitiría, jamás he pegado a nadie pero utilizaría todas mis fuerzas y mis dientes si hiciera falta para defenderme. No voy a volver a quedarme impasible cuando alguien vuelva a hacerme daño. Tampoco voy a permitir que nadie vuelva a decirme que no valgo. Nadie va a poder conmigo.
Por primera vez en mi vida tengo autoestima y es una sensación rara por cierto jaja. Nunca había visto mi futuro de una forma tan positiva.
Y lo mejor es que se que en unos meses mi vida va a ser muchísimo mejor si cabe
@Feroz El Mejor: jaja los Shiba inu tienen la capacidad de sacar sonrisillas, cuando pueda adoptaré uno :3