Ayer me emocioné cuando al darle las gracias a la jefa sobre mi ascenso laboral me contestara: de nada, TE LO MERECES.
Parecerá una tontería, pero estas cosas le llenan a uno más que el dinero.
Nunca antes los anteriores jefes me habían reconocido ningún esfuerzo y tener jefes que igual te pueden meter una bronca pero también valorar y expresarte abiertamente cuando se hacen las cosas bien para mi vale mucho.