Bueno, quienes me leais por aquí ya sabreis que siento un furibundo odio por las ratas, esto es, por los especuladores del mundillo retro que han jodido el sano mercadeo de basura a precios de risa que era esto a finales de los 90, inflando los precios y ganando pasta sin aportar nada.
El caso es que con el advenimiento de las implementaciones en FPGA de nuestras consolas clásicas, a mi modo de ver el hardware original se está quedando "cutre" en comparación con el ZX-UNO, la MiSTer, la Super NT y otras bestias pardas que, no sólo son implementaciones electrónicas exactas de algunas de nuestras máquinas favoritas recién fabricadas, sino que no tienen los puntos de fallo de las originales: ni PPUs que se mueren, ni condensadores que se joden, ni nada. Y encima se pueden poner en teles modernas y se ven de tres mil pares de huevos con sus scanlines y sus movidas.
Pues bien: llegó un punto, cuando recibí mis Super NT, que me di cuenta que no tiene ya sentido acumular las SNES que acumulé antaño, por si me iban fallando, porque no las voy a volver a poner en un CRT. Así que quería deshacerme de ellas, pero con respeto y de acuerdo a mis convicciones: no las iba a tirar a la basura, obviamente. Regalé un par de ellas a amigos que a día de hoy las usan, junto con algunos copiones y juegos... Pero tengo como cinco aún. Tampoco se las voy a vender a nadie, porque pueden acabar siendo objeto de especulación por parte de las ratas.
Pues bien, la solución acaba de presentarse sola: se las voy a enviar al tipo que está desarrollando el core libre de SNES en FPGA, para que le haga decapado a los chips o lo que tenga que hacerle. Es decir, ¡se van a algún país ex-soviético para ser estudiadas y probablemente destruidas, con el fin de perfeccionar el core de SNES para FPGAs!
Y se van gratis. Cinco máquinas menos que especular para las ratas, y mejores consolas en FPGA para todos.
Creo que este va a ser el destino de todo mi hardware clásico: ser regalado para ser estudiado y destruido en el proceso, con el fin de poder ser reimplementado libremente y que "viva para siempre".
¡Es algo casi filosófico!