Lidl escribió:Ahora, de vez en cuando fumo en el instituto (solo allí) pero es que no tengo la necesidad de fumar, si no que fumo, yo que se, o por que me invitan, o me pasan el cigarro, o fuma la chica que me gusta, o de vez en cuando algún porro.
Pues si no te apetece ni quieres fumar y te invitan, dices que no. ¿Cuando te ofrecen algún colega algo de comer que no te gusta, te lo comes? Pues esto es igual, sólo que además se junta que el tabaco acaba matando. Y si otro de tus motivos para fumar es porque la chica que te gusta fuma... Es de poca personalidad. No le vas a gustar más porque fumes al igual que ella, y si ella tiene dos dedos de frente, tampoco le gustará ser fumadora.
Bien, para empezar, la verdad es que no quiero fumar xD ni lo necesito, pero no sé, es como las pipas.
No lo hagas, y ahora es cuando SÍ estás a tiempo, cuando lleves un par de meses así (espero que no) ya me contarás si puedes decir con tanta facilidad que no vas a volver a fumar ningún cigarrillo.
Pero hay veces que no se, que me desestresa, y sobre todo por culpa de mi ex ando muy estresado y por las clases y demás.
No, no es así, el tabaco no te desestresa. A los que sí somos fumadores nos desestresa, pero no porque las sustancias de un cigarrillo tranquilicen, lo que realmente nos desestresa es volver a fumarnos un cigarrillo, porque nos calma el mono que teníamos del anterior. Si a ti no te gusta fumar, no estás enganchado, etc., el tabaco no tiene en ti ese efecto físico y psicológico (el mono físico que puede crear el tabaco apenas dura 20 minutos) que en los que somos fumadores, así que olvídate de que te desestresa.
Y a Namco decirle que lo que no quiero es ser fumador, vamos, estar enganchado, el fumar me da igual
Gran error pensar así. No te tiene que dar igual fumar, porque la consecuencia de fumar es que te volverás fumador. Es un gran autoengaño pensar que nosotros podemos controlar el tabaco, que nunca nos engancharemos a él, que sólo fumamos cuando nos apetece. No, llega un momento en que el tabaco nos domina a nosotros (sí, es bastante triste pensar que algo tan repugnante pueda dominarnos), y cuando eso ocurre, quitarse de fumar cuesta mucho mucho, sin contar la de sustancias que nos hemos metido ya en el cuerpo desde que se fuma hasta que se deja de hacer (quien lo consiga).
Y después de este tochillo, llega otro, contándote mi experiencia:
Yo empecé a fumar siendo muy joven, para ser exactos, con 14 años. No empecé por hacerme la "guay", ni porque mis amigos fumasen también, es más, no fumaba delante de ellos, pero eso es otra historia, y tampoco es motivo para no ponerme en la frente un gran "SOY IMBÉCIL" por ser fumadora y por no haberlo sabido dejar a tiempo. Decirte que llevo ya unos cuantos años fumando, y que desde el principio no se limitaba a fumar un par de cigarros una noche de discoteca, yo empecé a lo bestia, fumándome un paquete diario, y llegando a fumar incluso dos. Actualmente sigo siendo fumadora, y no hay cosa de la que más me haya podido arrepentir en mi vida que la de no haber sabido decir "NO" cuando empecé, porque ahora la cuesta es mucho más empinada para dejarlo.
Un saludo, y di "NO", estás a tiempo.