La Comisión Europea presentará a mediados de marzo una propuesta legislativa para crear un “Pase Verde Digital” cuyo objetivo será facilitar los viajes transfronterizos durante el próximo verano. No todos los países de la Unión Europea ven en este certificado digital la mejor solución para viajar en época de pandemia, pero ante su ausencia existe el riesgo de que algunos estados lleguen a acuerdos bilaterales o que las grandes tecnológicas (estadounidenses) saquen adelante su propia solución.
Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, ha comentado mediante su cuenta personal de Twitter que el Pase Verde Digital ofrecerá información sobre si la persona ha sido vacunada, resultados de los test de aquellos que aún no se han inoculado e información en caso de que hayan superado la COVID-19 (y tengan inmunidad). Todo ello “respetando la protección de datos, la seguridad y la privacidad”, asegura vor der Leyen en su mensaje.
“El Pase Verde Digital debería facilitar la vida de los europeos”, añade la presidenta de la Comisión Europea en un segundo tuit. “El objetivo es permitirles desplazarse gradualmente de forma segura en la Unión Europea o en el extranjero, ya sea por trabajo o turismo”.
El objetivo de la Unión Europea es que se establezca un sistema paneuropeo para que no se fragmente el mercado único mediante acuerdo bilaterales y evitar que exista un sistema impulsado por terceros. A principios de año Microsoft, Salesforce y Oracle anunciaron una alianza para crear la
Vaccination Credential Initiative (VCI), una iniciativa que quiere facilitar el acceso a la información para saber si el individuo está o no vacunado. Su meta es crear un estándar y ofrecer a los usuarios una “copia digital y encriptada que acredite su inmunización”.
La Comisión Europea está cuidando mucho sus palabras a la hora de hablar y bautizar el mencionado certificado digital. El ejecutivo no ha querido usar el término “pasaporte” para evitar que se relacione la solución con una limitación de libertades entre las personas que han sido vacunadas y las que no. A día de hoy el proceso de vacunación en Europa es lento por la falta de viales y no todo el mundo que quiere vacunarse puede hacerlo.
Al mismo tiempo, la Comisión siente la presión de varios estados miembros, especialmente de España y Grecia, cuyas economías dependen en gran medida del turismo. Harry Theoharis, ministro de turismo griego, ya ha
expresado su alegría por la propuesta de vor der Leyen. Por otro lado tenemos a Francia y Bélgica, que han echo notar su preocupación por permitir viajar solo a los vacunados.
Fuente: Reuters