En
octubre de 2020 Estados Unidos anunció la detención de Gary “GaryOPA” Bowser, uno de los miembros del Team Xecuter, por vender dispositivos ilegales para hackear Nintendo Switch como Xecuter Pro; en
noviembre de 2021 el arrestado se declaró culpable; y en febrero de 2022 el caso ha llegado a su fin: Gary Bowser ha sido condenado a 40 meses de prisión. Termina de esta forma el primer litigio que enfrentaba a un integrante del Team Xecuter con Nintendo.
Gary Bowser fue arrestado en la República Dominicana y extraditado a Estados Unidos, donde un fiscal lo acusó, junto a Max Louarn, un ciudadano francés de 48 años residente en Canadá, de ser el líder del Team Xecuter, “una empresa criminal que desarrolló y vendió dispositivos ilegales” que circunvalaban la seguridad de consolas de Nintendo “para poder ejecutar copias no autorizadas o pirateadas de videojuegos”. En concreto, Bowser fue denunciado por ser el encargado de ventas del Team Xecuter y el responsable de tratar con las tiendas.
Durante el proceso judicial Bowser se declaró culpable, un movimiento que lo dejó a merced del criterio de la fiscalía, que solicitaba 5 años de prisión, una pena que además de castigar al acusado por sus delitos buscaba ser un aviso para navegantes. Por su parte, los abogados de Bowser pidieron al tribunal una sentencia de como máximo 19 meses, de los cuales su cliente ya había cumplido 16. El letrado insistió en que su defendido no era la mente pensante, sino un peón de personas que habían ganado mucho dinero.
El juez ha elegido el camino del medio y condena a Bowser a 40 meses de prisión. A esta pena hay que sumarle los 4,5 millones de dólares que Bowser acordó pagar a Nintendo como compensación, pero no está claro si llegará a abonar este dinero. En estos casos se suele buscar una pena económica alta para sentar un precedente, pero en privado se negocian cantidades más pequeñas. Esta práctica posiblemente se usó en el
caso de LoveROMS y LoveRETRO, cuyos responsables fueron condenados a pagar 15 millones de dólares.
Se desconoce por ahora qué ha pasado con Max Louarn, un presunto miembro de Team Xecuter cuya detención se anunció el mismo día que la de Gary Bowser. En la misma acusación aparece un tercer nombre, el de Yuanning Chen, un ciudadano chino de 35 años al que de momento no se ha podido extraditar.
Fuente: torrentfreak